El fabricante de automóviles dijo en un comunicado que había elegido su planta de Valencia como el lugar preferido para ensamblar los vehículos basados en una arquitectura EV de próxima generación.

El otro contendiente para el proyecto era la planta de Ford en Saarlouis, Alemania, que seguirá produciendo su turismo Focus.

Los empleados de Valencia y Saarlouis han sido informados de que será necesaria una reestructuración a corto plazo y que su tamaño sería "significativo", dijo un portavoz de Ford a Reuters, sin dar más detalles.

Ford había advertido anteriormente que el cambio a la producción de vehículos eléctricos probablemente llevaría a recortar su plantilla, ya que los coches eléctricos requieren menos horas de trabajo para su montaje.

La plantilla de la planta de Ford en Valencia es de unas 6.000 personas, mientras que en Saarlouis trabajan unas 4.600.

El sindicato español UGT calificó de "gran noticia" la designación de la planta de VE, ya que garantiza la producción durante más de una década, mientras que la planta había visto reducida la producción de modelos anteriores.

UGT dijo que esperaba que la producción de VE comenzara en 2025.

Pero el sindicato dijo en un comunicado que el impulso del VE implicará discutir con Ford cómo se redimensionará la plantilla.

En marzo, Ford anunció planes para siete nuevos modelos eléctricos en Europa, un centro de montaje de baterías en Alemania y una empresa conjunta de fabricación de células de níquel en Turquía.

Dijo que en 2023 empezaría a producir un nuevo vehículo eléctrico de pasajeros en la planta alemana de Colonia, mientras que una versión EV de su modelo Puma se produciría en Rumanía a partir de 2024.

La alemana Volkswagen anunció a principios de este año que iniciaría la producción de VE en España en 2025, y que abriría una planta de producción de baterías en Valencia.