El líder norcoreano, Kim Jong Un, se reunió el miércoles con el presidente ruso, Vladímir Putin, en el Extremo Oriente ruso, según informaron los medios estatales, para mantener conversaciones que Washington sospecha que implicarán cooperación en materia de defensa, mientras en casa el ejército de Kim disparaba dos misiles balísticos.

"Me alegro de verle", dijo Putin al estrechar la mano de Kim durante unos 40 segundos, dándole la bienvenida en el cosmódromo de Vostochny, una moderna instalación de lanzamiento espacial en la región de Amur, en el Lejano Oriente ruso. "Este es nuestro nuevo cosmódromo".

Kim, hablando a través de un intérprete, agradeció a Putin la invitación y la calidez de su recibimiento.

La cumbre entre los líderes de ambos países, cada vez más aislados internacionalmente, está siendo observada con atención por Washington y sus aliados, que sospechan que podrían acordar el comercio de armas y tecnología de defensa.

Funcionarios estadounidenses y surcoreanos han expresado su preocupación por la posibilidad de que Kim discuta el suministro de armas y municiones a Rusia, que ha gastado vastas reservas en más de 18 meses de guerra en Ucrania. Moscú y Pyongyang han negado tales intenciones.

La elección de reunirse en el cosmódromo de Vostochny -un símbolo de las ambiciones de Rusia como potencia espacial- fue notable, ya que Corea del Norte fracasó dos veces en el lanzamiento de satélites de reconocimiento en los últimos cuatro meses.

En las imágenes difundidas por la agencia de noticias RIA, se ve a Kim y Putin estrechándose la mano con una amplia sonrisa, de pie en el exterior, rodeados de personal de seguridad y representantes de los medios de comunicación rusos, antes de entrar juntos en un reluciente edificio con paredes de cristal.

Las imágenes de televisión mostraron a Putin dando a Kim una visita guiada por las instalaciones.

Horas antes de la esperada cumbre, Corea del Norte lanzó dos misiles balísticos de corto alcance desde una zona cercana a la capital, Pyongyang, al mar frente a su costa oriental, según informaron el ejército surcoreano y el gobierno japonés.

Fue el primer lanzamiento de este tipo realizado por el Norte mientras Kim se encontraba en el extranjero, según los analistas, quien sólo ha viajado fuera del país siete veces en sus 12 años en el poder, todas ellas en 2018 y 2019. También cruzó brevemente la frontera intercoreana en dos ocasiones.

ZONAS SENSIBLES

Preguntado sobre si los líderes hablarían de armas, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que los dos países cooperan en áreas "sensibles", que no se harían públicas, según la agencia de noticias Interfax.

El martes, Peskov dijo que la visita de Kim sería "en toda regla" y que las dos partes llevarían a cabo "negociaciones". También podrían discutirse la ayuda humanitaria a Corea del Norte y las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU impuestas a Pyongyang, según han declarado funcionarios rusos.

El ministerio de Asuntos Exteriores ruso dijo que las conversaciones son importantes teniendo en cuenta los cambios geopolíticos en el mundo.

"Los contactos bilaterales son muy importantes. Y la situación en la península coreana es, por supuesto, de suma importancia para la seguridad y la estabilidad en la región", dijo la agencia estatal de noticias RIA citando a la portavoz del ministerio, Maria Zakharova.

Kim llegó a Rusia en tren privado el martes con altos cargos de la industria de defensa y ayudantes militares y dijo que su visita ponía de relieve la "importancia estratégica" de los lazos entre los dos países, informó el miércoles la agencia estatal de noticias del Norte, KCNA.

La composición de la delegación de Kim, con la notable presencia del director del Departamento de Industria de Municiones, Jo Chun Ryong, sugería una agenda muy centrada en la cooperación en la industria de defensa, según los analistas.

Kim podría ofrecer cartuchos de artillería del gran arsenal norcoreano, lo que podría reponer las capacidades de Rusia a corto plazo, pero las dudas sobre la calidad de la munición podrían limitar el impacto global, según los analistas militares.

Corea del Sur y Estados Unidos han advertido de que un acuerdo de este tipo violaría las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, que Rusia, como miembro permanente del consejo, votó para aprobar.

Corea del Norte es uno de los pocos países que ha apoyado abiertamente a Rusia en el conflicto de Ucrania, y Putin se comprometió la semana pasada a "ampliar los lazos bilaterales en todos los aspectos de forma planificada aunando esfuerzos". (Reportaje de Hyunsu Yim, Ju-min Park, Josh Smith y Soo-hyang Choi en Seúl, Kantaro Komiya en Tokio, Lidia Kelly en Melbourne y Guy Faulconbridge en Moscú, Redacción de Jack Kim en Seúl. Edición de Gerry Doyle)