En una carta al parlamento, el Ministerio de Finanzas estimó que los flujos de caja a través de los Países Bajos hacia países con tasas impositivas muy bajas habían caído un 85%, pasando de 38.500 millones de euros (40.500 millones de dólares) en 2019 a 6.000 millones de euros en 2021.

En 2021, el gobierno holandés comenzó a imponer un impuesto sobre los pagos de intereses y cánones salientes a países que tienen un tipo impositivo inferior al 9%, tras las críticas de los defensores de la equidad fiscal y la presión de otros gobiernos.

A partir de 2024 impondrá un impuesto similar sobre los dividendos a las jurisdicciones de baja imposición.

"Nuestra lucha contra la evasión fiscal no ha terminado, todavía hay demasiadas empresas buzón en Holanda", dijo el viceministro de Finanzas Marnix van Rij en un comunicado.

"El gabinete quiere profundizar su cooperación con otros países para luchar contra los abusos de las empresas que actúan como embudo".

En 2020, el gobierno reconoció que sus estimaciones anteriores sobre los flujos de dinero a través de los Países Bajos hacia los países de baja tributación habían sido demasiado bajas.

Dijo que la razón era que los estudios realizados en su nombre por SEO Amsterdam Economics sólo habían tenido en cuenta los pagos realizados en cada año y no habían considerado los beneficios retenidos que se pagarían más tarde.

(1 dólar = 0,9514 euros)