La libra subió hasta 1,2913 dólares, su nivel más alto desde abril de 2022, y por última vez cotizaba justo por debajo de ese nivel, con una subida del 0,37%.
Ha ganado un 6,6% en lo que va de año, la divisa principal con mejor comportamiento frente al dólar en 2023, ya que las subidas de precios en Gran Bretaña resultan más pegajosas que la inflación en otros lugares, lo que lleva a los operadores a apostar por que el BOE subirá los tipos más que otros bancos centrales.
Los precios actuales del mercado indican aproximadamente 125 puntos básicos más de subidas de tipos por parte del BOE, mucho más que para la Reserva Federal o el Banco Central Europeo.
Unos tipos más altos suelen ser un impulso para una divisa a corto plazo, aunque muchos analistas afirman que el golpe resultante para el crecimiento económico pesaría sobre la libra a largo plazo.
Los datos del martes mostraron que una medida clave de los salarios británicos alcanzó su mayor tasa de crecimiento registrada, aunque la tasa de desempleo aumentó inesperadamente.
"Los datos salariales indicaron que hay más trabajo por hacer para el Banco de Inglaterra y que las presiones inflacionistas de segundo orden aún están en ciernes", dijo Jane Foley, jefa de estrategia de divisas de Rabobank.
Dijo que aunque esas nuevas subidas de tipos ya estaban en el precio, los datos del martes habían reforzado esas opiniones.
La subida de la libra esterlina frente al dólar también se vio favorecida por una amplia caída del dólar. El índice del dólar, que sigue la evolución de la unidad frente a seis divisas principales, incluida la libra esterlina, cayó un 0,18% y se situó en mínimos de dos meses, aunque los datos del IPC estadounidense que se publicarán el miércoles podrían frenar ese descenso si resultan superiores a lo esperado.
La libra también se fortaleció frente al euro, que cayó un 0,34% hasta los 85,23 peniques, su mínimo desde mediados de junio.
