Los datos de las bolsas de India, Indonesia, Filipinas, Corea del Sur, Taiwán, Tailandia y Vietnam mostraron que los extranjeros salieron de un neto de 906 millones de dólares en acciones en marzo, para sus mayores ventas de este tipo desde diciembre de 2022.

Corea del Sur y Taiwán sufrieron una salida de extranjeros de 686 millones de dólares y 91 millones de dólares, respectivamente, el mes pasado.

Alicia García-Herrero, economista jefe para Asia-Pacífico de Natixis, dijo que aparte de la aversión al riesgo debida a los problemas bancarios en EE.UU. y Europa, los PMI asiáticos más débiles de marzo y los malos datos de China también estaban detrás de las salidas regionales.

La actividad fabril de Asia se debilitó en marzo debido a que la débil demanda exterior perjudicó a la producción, según mostraron las encuestas el lunes, lo que sugiere que el deterioro de las perspectivas mundiales seguirá siendo un lastre para la recuperación de la región y mantendrá alerta a los responsables políticos.

Los inversores también retiraron 1.000 millones de dólares de la renta variable tailandesa el mes pasado, tras haber retirado 1.300 millones en febrero por precaución ante las elecciones.

"Si nos fijamos en las últimas cinco elecciones, la renta variable tailandesa ha seguido un patrón de negociación coherente, con un rendimiento inferior hasta tres meses antes de las elecciones y, posteriormente, un rendimiento superior", afirmó Aman Patel, estratega de inversiones de Credit Suisse.

Sin embargo, la renta variable india, indonesia y vietnamita atrajo el mes pasado capitales extranjeros por valor de 967 millones de dólares, 273 millones de dólares y 129 millones de dólares, respectivamente.

"El apetito por el riesgo sigue siendo débil y el dólar estadounidense tiene que romper a niveles más bajos para que los inversores institucionales extranjeros (FII) se expongan más", afirmó Patel, de Credit Suisse.