Rusia es el quinto productor mundial de acero, mientras que Ucrania ocupa el puesto 14. Ambos combinados representan una quinta parte de las importaciones de la Unión Europea.

Los precios de las bobinas laminadas en caliente (HRC) en Europa se han disparado casi un 40% en las últimas tres semanas. Los precios en Norteamérica y China también han subido, pero mucho menos, en torno al 7-8%.

"Desde luego, parece que los precios seguirán subiendo a corto plazo. Prevemos que los precios volverán a subir a finales de este mes y en abril", dijo la analista Kaye Ayub de la consultora MEPS International.

"El lado de la oferta se ha visto masivamente interrumpido en Europa, y eso tardará bastante en resolverse".

Rusia y Ucrania tienen un peso superior al suyo en el mercado mundial del acero debido a sus cuantiosas exportaciones, especialmente a Europa.

"En Europa, el poder de fijación de precios sigue claramente en manos de las siderúrgicas... ya que la pérdida de cerca del 20% de las importaciones de acero acabado de Rusia/Ucrania aprieta el mercado", dijo el analista de UBS Andrew Jones en una nota.

Aunque las naciones occidentales no han apuntado específicamente a las empresas siderúrgicas rusas con sanciones, los problemas logísticos y el impacto de las sanciones han perturbado los negocios y los envíos.

Además de los temores de perder el suministro de Rusia y Ucrania, Europa también tiene que lidiar con un aumento de los precios de la energía debido al conflicto.

Su sector siderúrgico ya estaba lidiando con los elevados costes energéticos cuando la invasión de Rusia en Ucrania a finales de febrero provocó otro repunte en el precio del petróleo y el gas, haciendo subir los precios de la electricidad.

Los hornos eléctricos para la fabricación de acero representan algo más del 40% de la producción europea, más que en otras regiones.

Tras el estallido de las hostilidades, fabricantes de acero en España como ArcelorMittal y el productor de acero inoxidable Acerinox recortaron la producción, mientras que la alemana Lech-Stahlwerke detuvo la producción en Baviera.

El impacto total del conflicto aún no se ha manifestado en los datos de producción, pero la producción europea de acero en enero ya había descendido al nivel estacional más bajo desde 2009, según el analista de Bank of America Michael Widmer.

En febrero, la producción de acero bruto en la Unión Europea cayó un 2,2% intermensual y en el resto de Europa descendió un 4,8%, según datos de la Asociación Mundial del Acero.