Los productores de energía de Australia respaldaron una estrategia gubernamental para impulsar el desarrollo del gas natural, pero advirtieron de que el país aún se enfrenta a nuevos déficits de suministro de gas esta década, mientras los mercados siguen volátiles debido a los conflictos mundiales.

Meg O'Neill, presidenta de los Productores Australianos de Energía, declaró que el grupo acogía con satisfacción la Estrategia Futura del Gas publicada por el gobierno a principios de este mes, en la que se destacaba que se necesitarán nuevas fuentes de gas para satisfacer tanto la demanda interna como la de exportación durante la transición energética.

Esto se produce en medio de la volatilidad del mercado del petróleo y el gas debido a los conflictos en Ucrania y Oriente Medio, según una copia de un discurso que pronunciará el martes en una conferencia de la industria gasista australiana en Perth.

"Este es un reto al que Australia se enfrenta esta década. Como señala la Estrategia Futura del Gas, si no se toman medidas, la costa este de Australia se enfrenta a una escasez prevista para 2028 y la costa oeste para 2030", afirma O'Neill en el discurso, y añade que esto podría aumentar la volatilidad y hacer subir los precios para los hogares y las empresas.

"La mejor solución a una escasez es siempre el suministro, el suministro, el suministro... Y acogemos con satisfacción el reconocimiento en la Estrategia de que necesitaremos los marcos reguladores adecuados para hacerlo".

La Estrategia Futura del Gas de Australia, el segundo mayor exportador de gas natural licuado (GNL) el año pasado, llegó después de que el gobierno se enfrentara a las críticas por su serie de medidas a corto plazo para impulsar el suministro nacional de gas y bajar los precios de la energía en alza, como los topes de precios y los límites a la exportación de los tres proyectos de la costa este del país.

Las medidas suscitaron la preocupación de la industria por la posibilidad de que perjudicaran las inversiones energéticas a largo plazo.

Australia produce más gas del que necesita para satisfacer su demanda interna, pero la mayor parte del suministro se contrata para la exportación. El país enviará 80,9 millones de toneladas métricas de GNL en 2023, según el grupo de datos y análisis Kpler.

Sus mayores clientes son China, Japón y Corea del Sur, que son también los tres principales importadores mundiales del combustible superfrío.

Sin embargo, el operador del mercado energético australiano afirmó en marzo que la región sudoriental del país corre el riesgo de sufrir escasez de gas durante los meses de invierno del próximo año, ya que la demanda puede superar la oferta, y pidió nuevas inversiones urgentes para evitar cualquier posible déficit. (Reportaje de Emily Chow; Edición de Susan Fenton)