Los futuros del crudo estadounidense superaron brevemente los 94 dólares por barril, intensificando la preocupación por el aumento de los precios de la gasolina y su impacto en la inflación y el gasto de los consumidores.
El índice del dólar alcanzó su nivel más alto desde finales de noviembre de 2022, empujando al euro a un mínimo de casi 9 meses y manteniendo al yen en territorio de intervención, ya que los inversores apuestan a que Estados Unidos soportará mejor que otras economías unos tipos de interés más altos.
Las acciones y los bonos han estado bajando de precio en las últimas semanas mientras los inversores se preparaban para la perspectiva de que los banqueros centrales mantendrán los tipos de interés "más altos durante más tiempo" de lo previsto, para intentar exprimir la inflación de las economías mundiales.
Además de las preocupaciones sobre los tipos, la escalada de los precios del petróleo y la subida del dólar, los inversores también han estado pendientes de las huelgas de los trabajadores del sector automovilístico de Detroit, así como de la incertidumbre de un posible cierre del gobierno estadounidense en los próximos días.
"Es como un triple golpe para la renta variable estadounidense", dijo Irene Tunkel, estratega jefe para EE.UU. de BCA Research, con sede en Montreal, refiriéndose a la gasolina, los tipos y el dólar.
"El encarecimiento de la energía recortará el poder adquisitivo de los consumidores. Para mucha gente la gasolina es una parte importante de su gasto. Y teniendo en cuenta que los consumidores se están quedando sin ahorros, tendrán que trasladar el gasto a la gasolina y recortar en otras partidas. Esto pesará sobre el gasto de los consumidores y el crecimiento económico", dijo Tunkel.
"La subida del dólar endurece las condiciones financieras junto con la subida de los tipos. El dólar presiona a las multinacionales... es un cóctel letal", dijo.
El Promedio Industrial Dow Jones cayó 88,56 puntos, o un 0,26%, hasta los 33.530,32, el S&P 500 perdió 3,79 puntos, o un 0,09%, hasta los 4.269,74 y el Nasdaq Composite sumó 7,36 puntos, o un 0,06%, hasta los 13.070,97.
El índice paneuropeo STOXX 600 había cerrado con un descenso del 0,18%. El indicador MSCI de valores de todo el mundo cedió un 0,22% tras caer un 1,2% en la sesión del martes.
El índice mundial, que encadena su noveno descenso diario consecutivo, ha caído un 4,8% desde principios de septiembre, lo que supone su mayor pérdida mensual en un año.
Por su parte, Robert Pavlik, gestor sénior de carteras de Dakota Wealth en Fairfield, Connecticut, afirmó que algunos inversores salieron a buscar gangas a primera hora del día, pero no cree que el mercado haya tocado fondo todavía.
"Estamos en la cúspide, pero aún no hemos llegado. Todavía tenemos muchos vientos en contra: la huelga del sector automovilístico, la posibilidad de un nuevo cierre del Gobierno, unos tipos de interés más altos... y el petróleo cotizando por encima de los 90 dólares el barril", dijo Pavlik.
En los bonos del Tesoro estadounidense, tras caer hasta el 4,49% a primera hora del día, las notas de referencia a 10 años subían 6,8 puntos básicos, hasta el 4,626%, desde el 4,558% de última hora del martes. El bono a 30 años subió por última vez 3,4 puntos básicos hasta rendir el 4,7296%, desde el 4,696%. El bono a 2 años subió por última vez 6,9 puntos básicos hasta rendir el 5,1458%, desde el 5,077%.
En divisas, los inversores están pendientes de la intervención del gobierno en el yen japonés, ya que se ha acercado a 150 por dólar, que se considera el nivel en el que Japón podría intervenir.
El yen cayó un 0,39% frente al dólar y se situó en 149,60 por dólar, tras alcanzar su nivel más débil frente al billete verde en aproximadamente un año.
El índice dólar, que mide la cotización del billete verde frente a una cesta de divisas principales, subió un 0,461%, el euro bajó un 0,66% hasta 1,05 dólares, mientras que la libra esterlina cotizaba por última vez a 1,2131 dólares, un 0,21% menos en el día.
"Estados Unidos es el país más capacitado para hacer frente a estos nuevos retos: tipos de interés más altos y precios de la energía más elevados", dijo Marc Chandler, estratega jefe de mercado de Bannockburn Global Forex en Nueva York, citando la profundidad de los mercados de capitales estadounidenses y los hogares que son más inmunes a la subida de los tipos de interés.
"Sí, son vientos en contra importantes, pero Estados Unidos sigue pareciendo la toalla más seca del perchero. Las noticias procedentes de Europa no son realmente tan buenas", añadió Chandler.
Los precios del petróleo subieron el miércoles, después de que las reservas de crudo de EE.UU. cayeran más de lo previsto, lo que aumentó la preocupación por la escasez de suministros mundiales.
El crudo estadounidense subió un 3,6%, a 93,68 dólares por barril, tras tocar los 94,04 dólares, su nivel más alto desde finales de agosto de 2022. El Brent cotizaba a 96,88 $, un 3,11% más en el día.
