El acuerdo, negociado por Turquía y las Naciones Unidas en julio de 2022 para ayudar a aliviar una crisis alimentaria mundial, permitía los envíos de grano desde los puertos ucranianos del Mar Negro.

Sin embargo, Moscú abandonó el acuerdo el mes pasado, quejándose de que no se estaba aplicando un acuerdo de acompañamiento para facilitar las propias exportaciones rusas de grano y fertilizantes.

Preguntado por la invitación de Erdogan a Putin para que visite Turquía y discuta el acuerdo y otros asuntos urgentes, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, declaró: "Existe el entendimiento de que esta reunión tendrá lugar pronto".

"Solemos sincronizar los anuncios de este tipo de visitas con nuestros países socios. Anunciaremos en breve cuándo y dónde tendrá lugar. La reunión se está preparando, y se está preparando muy minuciosamente", dijo.

Anteriormente, la agencia de noticias estatal rusa RIA informó de que el ministro turco de Asuntos Exteriores, Hakan Fidan, visitaría Rusia, pero no dio más detalles.

Putin dijo a Erdogan en una llamada telefónica el 2 de agosto que Moscú estaba dispuesto a volver al acuerdo sobre el grano del Mar Negro tan pronto como Occidente cumpliera sus obligaciones con respecto a las exportaciones de grano de la propia Rusia.

Las exportaciones rusas de cereales y fertilizantes no están sujetas a las sanciones occidentales impuestas a Moscú por sus acciones militares en Ucrania. Pero Moscú ha dicho que las restricciones en los pagos, la logística y los seguros han sido un obstáculo para los envíos.

Los precios mundiales del grano han subido desde que Moscú dejó expirar el acuerdo el 17 de julio, mientras Rusia ha atacado repetidamente los puertos ucranianos y las instalaciones de almacenamiento de grano.

Tanto Ucrania como Rusia son los principales exportadores de grano. Se exportaron casi 33 millones de toneladas de grano ucraniano durante el año que estuvo en vigor el acuerdo del Mar Negro.