GINEBRA, 17 mar (Reuters) - En un informe publicado el viernes, expertos en derechos humanos de la ONU acusaron a Bielorrusia de abusos sistemáticos, incluida la represión de manifestantes y disidentes, que podrían constituir crímenes contra la humanidad.
El documento, publicado por el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, abarca el periodo previo a las controvertidas elecciones presidenciales del 9 de agosto de 2020 y la represión de manifestantes y críticos en los meses posteriores.
El presidente, Alexander Lukashenko, un firme aliado de Rusia que se aseguró su sexto mandato en la votación, ha rechazado las acusaciones de violaciones y ha acusado a potencias extranjeras de respaldar las protestas.
El Ministerio de Asuntos Exteriores bielorruso no respondió inmediatamente a una petición de comentarios el viernes.
"Hay motivos suficientes para creer que en Bielorrusia se han cometido y se siguen cometiendo violaciones sistemáticas, generalizadas y graves de los derechos humanos", afirma el informe.
"Algunas de las violaciones pueden constituir también crímenes contra la humanidad", añadía.
Entre las violaciones se incluyen el "uso generalizado, innecesario y desproporcionado de la fuerza" por parte de los servicios de seguridad, la tortura, las detenciones arbitrarias y la impunidad, según el informe.
Los abusos "parecen haber formado parte de una campaña de violencia y represión" contra quienes critican al Gobierno, añade el informe.
"Lamentamos que el Gobierno de Bielorrusia no haya estado dispuesto a reconocer el mandato, a comprometerse positivamente con nuestro examen y a permitir el acceso al país", dijo a la prensa Elizabeth Throssell, portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Lukashenko ha gobernado el antiguo país soviético con mano de hierro desde 1994.
Cientos de personas fueron detenidas y golpeadas durante las manifestaciones que tuvieron lugar después de que Lukashenko fuera declarado vencedor de las elecciones presidenciales de 2020, un resultado que la oposición y los países occidentales consideraron fraudulento.
(Información de Gabrielle Tétrault-Farber; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)
