El ataque contra la base militar, que alberga a soldados, policías y otras fuerzas de seguridad, en el área de gobierno local de Batsari, en el estado de Katsina, se produjo a última hora del domingo, según declaró a Reuters el residente Isa Bello.

El portavoz de la policía de Katsina, Abubakar Sadiq, no respondió inmediatamente a las llamadas en busca de comentarios.

Bandas de hombres fuertemente armados, denominados bandidos por los lugareños, han sembrado el caos en el noroeste de Nigeria en los últimos tres años, secuestrando a miles de personas, matando a cientos y haciendo inseguro viajar por carretera o cultivar la tierra en algunas zonas.

Bello dijo que los bandidos, que llegaron en motocicletas y un camión aproximadamente a las 2200 GMT, arrollaron a las fuerzas militares tras un intercambio de disparos de tres horas.

Una fuente de seguridad dijo que los atacantes incendiaron vehículos y otras propiedades en el campamento y se dirigieron a la aldea de Nahuta donde saquearon tiendas y casas, robando bienes y ganado por valor de millones de nairas.

Un funcionario del gobierno del estado de Katsina confirmó que no hubo víctimas en la aldea.

Las fuentes y el funcionario pidieron no ser nombrados ya que no están autorizados a hablar con los medios de comunicación.

El ataque al campamento militar ha provocado un pánico generalizado entre los residentes de Nahuta, muchos de los cuales han huido a pueblos cercanos en busca de refugio, dijo Bello.