17 ene (Reuters) - Las colocaciones de deuda europea han tenido su comienzo de año más rápido de todos los registrados, en un momento en que los Gobiernos y las instituciones financieras aprovechan la caída de los costes de endeudamiento desde máximos de varios años.

Los emisores recaudaron 170.000 millones de euros (184.000 millones de dólares) en las dos primeras semanas de 2023 con las ventas de bonos en euros y libras esterlinas, según mostraron los datos de Refinitiv, la mayor cantidad vendida en este periodo que se ha registrado desde el año 2000.

La fuerte caída de los precios del gas, las esperanzas de que la inflación esté tocando techo y de que la recesión sea más leve de lo previsto han impulsado la confianza.

Los costes del endeudamiento, que registraron su mayor subida en 2022, han caído con fuerza en enero. El rendimiento de los bonos alemanes a 10 años ha bajado casi 40 puntos básicos, registrando la mayor caída mensual desde julio.

El rendimiento de los bonos corporativos con grado de inversión en euros ha bajado 30 puntos básicos y el coste de asegurar la exposición a la deuda por debajo del grado de inversión ha tocado el nivel más bajo desde abril

"Esta enorme cantidad de deuda me sugiere que los mercados están en buena forma y que existe una fuerte demanda de renta fija", afirmó Chris Iggo, director de inversiones de AXA Investment Managers.

Detrás de este récord está el fuerte aumento de las colocaciones de deuda por parte de las entidades financieras. Las cuantiosas ventas de deuda de bancos como Santander y Société Générale impulsaron la emisión de 52.000 millones de euros en las dos primeras semanas del año, el doble que en 2022.

Analistas consultados señalaron que, a medida que los bancos emiten deuda con más frecuencia para financiar sus balances, tienen más incentivos para aprovechar la caída de los rendimientos.

Las emisiones de las empresas cayeron un 33%, a 20.000 millones de euros, según los datos de Refinitiv.

Las empresas, que emiten deuda con menos frecuencia, pueden verse desalentadas por los mayores costes de endeudamiento del mercado en relación con lo que pagan por su deuda en circulación, según los analistas.

Los Gobiernos y otros prestatarios del sector público colocaron 69.000 millones de euros de deuda sindicada vendida directamente a inversores finales, justo por debajo del récord de 2020, según los datos de Refinitiv.

Portugal, Irlanda, Austria y Bélgica lanzaron sus operaciones antes que el año pasado.

"El mercado estaba muy bien posicionado para recibir toda la oferta temprana de 2023", dijo Maric Post, director de la agencia de deuda belga, que registró una demanda casi récord en bonos a 10 años.

"Sabíamos que nuestro precio era bastante atractivo (para los inversores)", añadió Post, señalando que los rendimientos están en su nivel más alto en años.

Los bonos del Estado han registrado aportaciones durante las últimas siete semanas, mientras que los bonos corporativos con grado de inversión registraron su mayor aportación desde julio de 2021 en la semana hasta el miércoles, según BofA, que se basa en datos de EPFR.

"A pesar de este nivel récord de emisiones, seguimos viendo un estrechamiento de los diferenciales. Eso es bastante inusual", dijo David Arnaud, gestor de fondos de Canada Life Asset Management.

(1 dólar = 0,9246 euros)

(Reporte de Yoruk Bahceli, información adicional de Chiara Elisei; editado en español por Flora Gómez)