Las denominadas tarifas sociales son accesibles para quienes reciben algún tipo de ayuda estatal.

"De los casi 5.000.000 de hogares que podrían beneficiarse de una banda ancha más barata, sólo lo hacen actualmente unos 55.000. Menos de una cuarta parte de esas familias que cumplen los requisitos eran conscientes de que las ofertas estaban disponibles", dijo Dorries en el comunicado.