Bunge Limited informó los resultados de las ganancias consolidadas no auditadas para el segundo trimestre y los seis meses terminados el 30 de junio de 2018. Para el trimestre, las ventas netas de la compañía fueron de 12.147 millones de dólares frente a los 11.645 millones de dólares de hace un año. La pérdida de las operaciones continuas, neta de impuestos, fue de 19 millones de dólares frente a los ingresos de 125 millones de dólares de hace un año. La pérdida neta atribuible a la empresa fue de 12 millones de dólares, frente a los ingresos de 81 millones de dólares de hace un año. La pérdida neta disponible para los accionistas ordinarios de Bunge fue de 21 millones de dólares, frente a los ingresos de 72 millones de dólares de hace un año. La pérdida neta por acción ordinaria diluida atribuible a los accionistas ordinarios de la empresa por operaciones continuas fue de 0,20 dólares, frente a los beneficios por acción de 0,48 dólares de hace un año. La pérdida neta por acción ordinaria diluida fue de 0,15 dólares, frente al beneficio por acción de 0,51 dólares de hace un año. El beneficio neto ajustado atribuible a la empresa fue de 30 millones de dólares, frente a los 38 millones de hace un año. Los ingresos netos ajustados (excluyendo ciertas ganancias y cargos y operaciones discontinuadas) fueron de 14 millones de dólares o 0,10 dólares de ganancias diluidas por acción, frente a 23 millones de dólares o 0,17 dólares de ganancias diluidas por acción de hace un año. En seis meses, las ventas netas de la empresa fueron de 22.788 millones de dólares, frente a los 22.766 millones de dólares de hace un año. Las pérdidas de las operaciones continuas, netas de impuestos, fueron de 38 millones de dólares, frente a los 128 millones de dólares de hace un año. La pérdida neta atribuible a la empresa fue de 38 millones de dólares, frente a los 356 millones de ingresos de hace un año. La pérdida neta disponible para los accionistas ordinarios de la empresa fue de 50 millones de dólares, frente a unos ingresos de 111 millones de dólares hace un año. La pérdida neta por acción ordinaria diluida atribuible a los accionistas ordinarios de la empresa por operaciones continuas fue de 0,39 dólares, frente a los beneficios por acción de 0,79 dólares de hace un año. La pérdida neta por acción ordinaria diluida fue de 0,36 dólares, frente al beneficio por acción de 0,79 dólares de hace un año. El efectivo neto utilizado para las actividades de explotación fue de 3.338 millones de dólares, frente a los 1.309 millones de dólares de hace un año. Los pagos realizados para gastos de capital fueron de 220 millones de dólares, frente a los 342 millones de hace un año. El beneficio neto ajustado atribuible a la empresa fue de 28 millones de dólares, frente a los 91 millones de hace un año. Los ingresos netos ajustados (excluyendo ciertas ganancias y cargos y operaciones discontinuadas) fueron de 6 millones de dólares o 0,04 dólares de ganancias diluidas por acción frente a los 74 millones de dólares o 0,52 dólares de ganancias diluidas por acción de hace un año. La compañía espera para 2018: un rango de tasas impositivas del 18% al 22%; gastos netos de intereses en el rango de 270 a 285 millones de dólares; gastos de capital de aproximadamente 650 millones de dólares, lo que supone una reducción de 50 millones de dólares con respecto a la estimación anterior, lo que hará que el capex se sitúe por debajo de las previsiones de depreciación, agotamiento y amortización de aproximadamente 690 millones de dólares. En Agroindustria, la empresa esperaba que los resultados del EBIT de todo el año se situaran en el extremo superior de la horquilla de 800 millones de dólares a 1.000 millones de dólares. En Alimentación e Ingredientes, la empresa esperaba que los resultados se situaran en el extremo inferior de la horquilla de EBIT para todo el año, de 290 a 310 millones de dólares, como consecuencia de unos resultados más flojos de lo esperado en el segundo trimestre en el sector de los aceites comestibles en Sudamérica y de la debilidad de las divisas en algunos de los principales mercados. Se espera que los resultados del segundo semestre mejoren secuencialmente. En Azúcar y Bioenergía, basándose en la previsión de una menor producción de caña por la sequía y un aumento más lento de lo esperado de los precios del etanol en Brasil, la empresa está ajustando las perspectivas de EBIT para todo el año hasta el punto de equilibrio, lo que incluye una pérdida prevista de 20 millones de dólares en el negocio de comercio y distribución.