La autoridad tributaria de Brasil pronto citará a las criptobolsas extranjeras que no tienen sede en el país para que expliquen sus operaciones y cómo cooperan con los proveedores de servicios locales, dijeron funcionarios del gobierno a Reuters el lunes.

Se espera que el servicio de ingresos fiscales publique esta semana una ordenanza convocando a estas empresas para obtener más información. A diferencia de las bolsas formalmente establecidas en Brasil, éstas no están obligadas a informar sobre las transacciones realizadas en sus plataformas.

"Es un área de preocupación para nosotros entender primero cómo operan aquí, si hay alguna ilegalidad o no. También nos preocupa tener aquí información sobre la riqueza brasileña sujeta a impuestos", dijo Andrea Chaves, subsecretaria de inspección del servicio federal de ingresos.

Wagner Lima, coordinador de gestión de riesgos en el servicio de ingresos, dijo que el gobierno también pretende entender cómo cooperan estas bolsas con los proveedores de servicios en el país para asegurarse de que proporcionan la información exigida por el servicio de ingresos fiscales en virtud de un reglamento de 2019.

Entre las bolsas que no tienen sede en Brasil pero que operan en el país e incluso tienen sitios web en portugués se encuentran Binance, Coinbase, OKX y KuCoin.

La convocatoria se produce en medio de un auge de los criptoactivos en la mayor economía de América Latina.

De enero a julio de 2023, los brasileños declararon 133.600 millones de reales (24.600 millones de dólares) en criptoactivos, un aumento del 36,6% respecto al mismo periodo del año anterior, según los últimos datos del servicio de recaudación, que está trabajando en una actualización tecnológica para publicar nuevas cifras.

De este total, 14.500 millones de reales se declararon utilizando bolsas en el extranjero, un crecimiento del 51,2% sobre la misma base. En este caso, proporcionar información al gobierno depende de los contribuyentes, ya sean personas físicas o jurídicas. (1$ = 5,4245 reales) (Reportaje de Marcela Ayres, Edición de Louise Heavens)