Los supermercados y los fabricantes de alimentos envasados luchan contra el aumento de los costes, provocado por la escasez y todo tipo de inflación, desde el transporte hasta las materias primas. Esta inflación galopante también significa que los consumidores se están apretando el cinturón. El viernes, Tesco advirtió que los británicos estaban comprando menos, cambiando a productos de marca propia más baratos y comprando más a menudo para intentar hacer frente a la crisis del coste de la vida.

A principios de este año, algunas tiendas de alimentación se vieron obligadas a retirar productos de las estanterías porque no podían seguir vendiéndolos. Estos factores están haciendo que uno de los mayores fabricantes de alimentos del mundo se replantee la forma de vender sus productos más vendidos, que van desde el yogur Activia hasta el agua Evian.

"La inflación es una dinámica, sobre todo en Europa, a la que tenemos que empezar a acostumbrarnos", dijo Ayla Ziz, directora de ventas globales de Danone. La empresa ha reducido el número de unidades de conservación de existencias (SKU), lo que significa que algunos supermercados ofrecerán menos variaciones de productos Danone en sabores y tamaños, añadió. El hecho de tener menos SKUs reducirá los costes por tipo de producto, añadió, diciendo que Danone está revisando su "cartera completa" con cada cliente para determinar qué SKUs quiere eliminar.

Empresas de gran consumo como Danone fabrican muchas versiones del mismo producto, desde botes grandes a pequeños del mismo yogur, diferentes sabores y envases económicos. Danone no está retirando toda una línea de productos del mercado, pero la simplificación de su gama significa que algunos de ellos podrían sacrificarse para que a los minoristas les resulte más barato almacenarlos y gestionar un inventario más pequeño y menos complejo. Por ejemplo, los supermercados tendrían que gastar menos dinero en almacenar, controlar y transportar los productos.

El ejecutivo no especificó qué gamas podrían ser objeto de la misma. "No se trata de una reducción global de ciertos productos", explicó.

Lógica

María Castroviejo, analista senior de Rabobank Research, dijo que estas medidas tienen sentido para las empresas que tratan de ser más eficientes. Muchas empresas hicieron algo similar al comienzo de la pandemia de COVID-19. "Si tienes que hacer muchos lotes pequeños de diferentes productos, tienes más trastornos, tienes que encontrar más ingredientes", explicó. Danone quiere "seguir siendo competitiva", por lo que no está recortando las promociones, sino vendiendo menos tipos de productos, lo que también le ayudará a reducir los costes logísticos.

Según Ziz, Danone también está invirtiendo en programas informáticos que le ayuden a fijar los precios de los productos a un nivel más preciso que los consumidores puedan aceptar. Las medidas se producen mientras los fabricantes de alimentos continúan con las prolongadas negociaciones de precios con los supermercados iniciadas el año pasado, que han sido especialmente difíciles en Europa, donde los costes de transporte han alcanzado niveles récord.