La cátedra de enseñanza e investigación "Diseño y arquitectura de sistemas aéreos cognitivos", iniciada en 2016 por Dassault Aviation, ISAE-SUPAERO y su Fundación, tiene como objetivo repensar la relación entre las tripulaciones y los sistemas utilizados en la aviación. Tras unos primeros resultados prometedores, los dos actores de la aviación han decidido renovar su colaboración por otros tres años. Esta cátedra, cuyas principales áreas de investigación son la neuroergonomía, la toma de decisiones automatizada y la ingeniería de sistemas, tiene como objetivo estudiar diferentes aspectos de la colaboración hombre-máquina. La idea es hacer que las operaciones de la aviación civil y militar sean más robustas, eficaces y seguras, garantizando al mismo tiempo el control total de la tripulación. Los sistemas considerados se operan a menudo en situaciones complejas, por lo que cuentan con algoritmos avanzados de toma de decisiones automatizadas procedentes del campo de la inteligencia artificial (IA) para llevar a cabo sus misiones de forma más independiente, pero siempre bajo control humano. En ISAE-SUPAERO, el Departamento de Diseño y Control de Vehículos Aeroespaciales (DCAS) tiene experiencia en neuro-ergonomía e IA para el control de sistemas. El campo de la neuroergonomía analiza el funcionamiento del cerebro y los comportamientos del usuario en el trabajo a través de la lente de la neurociencia. En términos prácticos, se trata de evaluar el estado mental de los usuarios en relación con su capacidad para completar las tareas asignadas. La IA para el control de sistemas es el campo que desarrolla algoritmos para la toma de decisiones automatizada. Las decisiones se refieren, por ejemplo, al conjunto de tareas que deben sugerirse al operador o que deben automatizarse por completo para aliviar la carga de trabajo del operador’y mejorar su rendimiento en el contexto operativo. Los trabajos realizados por la cátedra de investigación sobre la interacción hombre-máquina entre 2016 y 2021 permitieron desarrollar diferentes herramientas basadas en mediciones fisiológicas, así como técnicas de aprendizaje automático y planificación de acciones automatizadas. Los equipos se centraron especialmente en el desarrollo de funciones de asistencia activa o pasiva para ayudar a los pilotos y operadores a mejorar su rendimiento. Para ello, el trabajo se centró inicialmente en la "monitorización del piloto" para conocer mejor la actividad de la tripulación. Se realizaron experimentos en simuladores utilizando herramientas de medición conductual y fisiológica para determinar métricas capaces de evaluar el rendimiento del operador’y su nivel de compromiso o estrés. Dassault Aviation tiene previsto integrar estas funciones en sus aviones civiles y militares en la próxima década.