Dragonfly Energy Holdings Corp.ha logrado un importante avance en la fabricación de baterías con la producción con éxito de electrodos libres de PFAS en las celdas de las baterías de litio. A medida que aumenta la preocupación por los PFAS (sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas), también conocidos como "productos químicos para siempre", Europa está a punto de promulgar restricciones sobre su uso. Esto podría afectar negativamente a muchos proveedores de pilas, ya que los PFAS son una sustancia química habitual en la producción de pilas de iones de litio que se ha relacionado con riesgos medioambientales y para la salud.

La Agencia de Protección Medioambiental de EE.UU. (EPA) también ha estado tomando medidas para abordar estas crecientes preocupaciones sobre los PFAS. Los PFAS suponen un reto cada vez mayor para la industria de las baterías de iones de litio. Estas sustancias se utilizan ampliamente en los componentes de las baterías, desde los electrolitos hasta los aglutinantes de los electrodos, pero pueden liberarse al medio ambiente durante su producción, eliminación y reciclaje.

Dragonfly Energy reconoció este hecho como una oportunidad de diferenciación y utilizó el proceso de fabricación de baterías de electrodo seco patentado por la empresa para producir con éxito una pila de litio funcional utilizando electrodos sin PFAS. La producción tradicional de baterías de iones de litio depende tanto de PFAS como de disolventes tóxicos como la NMP (N-metil-2-pirrolidona). Dragonfly Energy no sólo ha demostrado con éxito su capacidad para producir electrodos sin PFAS, sino que el proceso de fabricación de electrodos en seco propiedad de la empresa ha sido validado recientemente por su proceso sostenible y rentable.

Este proceso, que destaca por no utilizar disolventes tóxicos, también presenta una huella de fabricación un 22% menor, consume un 25% menos de energía y presenta una huella de carbono un 9% menor en comparación con los métodos de fabricación convencionales. La Unión Europea está preparada para un cambio importante en su enfoque de la regulación de los PFAS, con una propuesta de prohibición de más de 10.000 sustancias químicas PFAS en el horizonte. Esta agresiva restricción, actualmente en fase de evaluación por parte de la Agencia Europea de Sustancias y Preparados Químicos (ECHA), podría entrar en vigor ya en 2026.

Destinada a salvaguardar la salud pública y el medio ambiente, esta prohibición supone un reto importante para la industria europea de las pilas, que atraviesa una fase crítica de crecimiento. Reconociendo el potencial global de su proceso de fabricación de baterías de electrodo seco y su capacidad para producir electrodos sin PFAS, Dragonfly Energy está explorando oportunidades de asociación internacional. Estas asociaciones podrían adoptar la forma de licencias para su proceso de fabricación de pilas escalables, lo que permitiría a los fabricantes establecidos adoptar la tecnología respetuosa con el medio ambiente de Dragonfly Energy.

Además, Dragonfly Energy está abierta a desarrollar conjuntamente pilas de batería de nueva generación adaptadas específicamente a las necesidades de nuevos mercados. Dragonfly Energy cree que este enfoque estratégico les posiciona como líderes en el cambiante panorama de la producción de baterías, bien equipados para hacer frente a la creciente demanda de soluciones de energía limpia en todo el mundo.