iBio, Inc. compartió una actualización sobre su programa de vacuna contra la COVID-19, IBIO-202. iBio recibió recientemente la respuesta de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) a su paquete de pre-investigación de nuevos medicamentos (IND) para IBIO-202. A la luz de la respuesta recibida, la compañía está avanzando con los estudios de desafío que permiten la IND para su candidato a vacuna de segunda generación dirigido a la proteína de la nucleocápside (N) y planea presentar una solicitud de IND antes del final del calendario de 2022. Las vacunas de primera generación disponibles en el mercado se dirigen a la proteína de la espiga (S), que muta con frecuencia, lo que da lugar a períodos de inmunidad decrecientes y a la propagación de nuevas variantes. Estos hechos han llevado a la Organización Mundial de la Salud a afirmar que es poco probable que una estrategia de vacunación basada en repetidas dosis de refuerzo de la composición original de la vacuna sea apropiada o sostenible. Mientras tanto, siguen apareciendo pruebas de que las células T reactivas N-, y no S-, parecen desempeñar un papel protector contra el SARS-CoV-2 y potencialmente también contra otros betacoronavirus. La empresa informó anteriormente de que había completado amplios estudios preclínicos y había identificado un emparejamiento antígeno-adyuvante con una inclinación Th1 favorable. La respuesta de citoquinas observada con este emparejamiento indicaba la activación de una respuesta inmunitaria primaria, la diferenciación de células T maduras y la reactivación de células T de memoria.