En diciembre, la compañía dijo que alrededor de 1.000 trabajadores de las tiendas Zara y de otras marcas de Inditex en A Coruña, donde el gigante de la moda tiene su sede en las afueras de la ciudad, recibirían este año un 25% más de salario tras la huelga convocada durante la fiebre de ventas del 'Black Friday' los días 24 y 25 de noviembre.

Los dos mayores sindicatos españoles, CCOO y UGT, que representan a más de la mitad de la plantilla de las tiendas Zara en el país, han iniciado ahora negociaciones con Inditex para extender las subidas salariales y los beneficios a todos los dependientes que trabajan para la compañía en España.

"Queremos que los mejores beneficios y salarios que Inditex acordó con los dependientes (en A Coruña) sean percibidos por los trabajadores de todas las tiendas de España", dijo Alvaro Cajigal, dirigente de UGT.

Hasta ahora, Inditex había estado negociando los acuerdos salariales con los trabajadores de cada provincia por separado.

"Queremos ir a una negociación en la que no haya discriminación en el pago a los trabajadores por estar en una región española u otra, o por trabajar en una tienda Zara en vez de en tiendas de otras marcas del grupo", dijo la sindicalista Lucía Trenor, de CCOO.

Los sindicatos buscan un aumento de los salarios de los trabajadores de las tiendas en España de al menos un 6% y hasta un 25% este año para contrarrestar la galopante inflación, dijo Trenor.

La empresa no respondió inmediatamente a una petición de comentarios sobre las nuevas conversaciones.

En noviembre, Inditex acordó con UGT y CCOO el pago de una prima única de 1.000 euros en febrero para todos los dependientes empleados a tiempo completo en toda España, y discutir otros beneficios.

Inditex emplea a 165.000 personas en 177 países, con un tercio de la plantilla en España, según su informe anual. Alrededor del 86% trabaja en sus 6.477 tiendas y la mayoría son mujeres.