"Sólo puedo decir que estas demandas se han presentado en interés del pueblo de Kazajstán", declaró Satkaliyev a la prensa, negándose a dar más detalles sobre las reclamaciones.

El yacimiento marino de Kashagan, uno de los mayores descubrimientos de las últimas décadas, está siendo explotado por Eni, Shell, TotalEnergies, ExxonMobil, KazMunayGas, Inpex y CNPC.

Eni, Shell y KazMunayGaz también son socios en Karachaganak, junto con Chevron y LUKOIL.

Ambos proyectos están cubiertos por acuerdos de reparto de la producción que estipulan que las empresas pueden deducir ciertos costes de los ingresos antes de repartirlos con el gobierno. La cuantía de las deducciones reclamadas por las empresas determinaría la cantidad de ingresos que hay que repartir entre ellas y el gobierno.

Kashagan y Karachaganak son el segundo y tercer productor de petróleo, respectivamente, de la nación centroasiática, cuya economía depende en gran medida de las exportaciones energéticas.

El gobierno de Astana ya ha tenido una serie de disputas con sus socios sobre los términos de los acuerdos petrolíferos, que normalmente terminaban con acuerdos.