Rescale ha anunciado que se asocia con el líder en computación cuántica IonQ para fusionar la potencia bruta de procesamiento de la computación acelerada en la nube con el potencial único de resolución de problemas de la computación cuántica. Esta asociación forja un nuevo camino para abordar los retos más intrincados a los que se enfrentan el desarrollo de productos, la sanidad, las ciencias de la vida, los servicios financieros, la investigación de materiales, la optimización logística y los laboratorios nacionales de investigación. La experiencia de Rescale en computación acelerada basada en la nube, junto con su catálogo de más de 1.000 aplicaciones de I+D llave en mano, sientan las bases de esta potente colaboración.

La plataforma Rescale agiliza el acceso a una infraestructura informática de alto rendimiento de vanguardia y a una amplia selección de software de aplicación, lo que permite a científicos e ingenieros ampliar los límites de la simulación y la innovación impulsada por la IA. La infraestructura robusta y escalable de Rescale actúa como trampolín para la revolucionaria tecnología cuántica de IonQ. Los avanzados ordenadores cuánticos de IonQ, como el IonQ Forte de 29 qubits, desbloquean soluciones que antes se consideraban imposibles.

Al aprovechar los principios fundamentales de la mecánica cuántica, estas máquinas pueden abordar cálculos complejos en una fracción del tiempo que tardan los ordenadores tradicionales. Esto abre las puertas a descubrimientos revolucionarios en áreas como la investigación científica y el desarrollo de productos de ingeniería. Más allá de los conocimientos técnicos y científicos que cada organización aporta al mercado, IonQ y Rescale se asociarán para ofrecer a los clientes capacidades de computación cuántica para el desarrollo de soluciones híbridas (clásicas y cuánticas), una piedra angular crucial para desbloquear todo el potencial empresarial de la creación de valor a partir de la tecnología cuántica.

La sinergia entre Rescale e IonQ va más allá del mero hardware y software. Su asociación fomenta un entorno de colaboración en el que convergen la experiencia científica, la potencia de cálculo y los conocimientos cuánticos. Este ecosistema único permite a los investigadores explorar territorios inexplorados en los ámbitos de la sanidad, las ciencias de la vida y la seguridad nacional, impulsándoles hacia avances que podrían redefinir el futuro.