Yara ha anunciado la firma de un contrato con Linde Engineering para la construcción y entrega de una planta de demostración de hidrógeno verde en las instalaciones de producción de amoníaco de Yaras en el parque industrial de Herøya, en Porsgrunn (Noruega). El proyecto, que cuenta con una subvención de 283 millones de coronas noruegas de Enova, demostrará que el amoníaco producido con energías renovables puede reducir el impacto del dióxido de carbono en la producción de fertilizantes. El proyecto se llevará a cabo mediante la electrólisis del agua, que producirá hidrógeno verde para sustituir parcialmente la producción de hidrógeno a base de hidrocarburos en la planta de Yaras, utilizando la tecnología de membrana de intercambio de protones (PEM). Esta será la segunda planta de electrólisis PEM de 24 MW diseñada y construida por Linde Engineering; la primera se está construyendo en el Complejo Químico de Leuna, en Alemania. La planta tendrá una capacidad anual de unos 10.000 kg/día de hidrógeno. Sustituirá al etano como materia prima en la producción, reduciendo así 41.000 toneladas de emisiones de dióxido de carbono al año, la misma cantidad que emiten unos 16.000 vehículos de pasajeros. La electricidad procederá de fuentes de energía renovables y proporcionará suficiente hidrógeno para producir 20.500 toneladas de amoníaco al año, que pueden convertirse en entre 60.000 y 80.000 toneladas de fertilizante verde, aproximadamente cinco veces la producción anual de trigo de calidad alimentaria en Noruega. El proyecto será el primer paso de Yaras hacia la descarbonización de la industria del amoníaco.