Royal Philips ha anunciado los resultados de un análisis económico sanitario publicado en la revista Journal of NeuroInterventional Surgery (JNIS) que demuestra que un enfoque innovador de la vía de atención del ictus redujo los costes en una media de 2.848 euros (3.120 dólares) por paciente. El análisis retrospectivo analizó los datos del ensayo clínico controlado unicéntrico ANGIOCAT realizado en la Unidad de Ictus del Hospital Universitario Vall d'Hebron (Barcelona, España) [1]. Los resultados anteriores de este estudio demostraron que una vía "directa a la sala de angiografía" (DTAS) mejora los resultados clínicos de los pacientes que han sufrido un ictus.

Esto indica que la inversión inicial de un flujo de trabajo directo a la suite de angiografía dará lugar a un rápido retorno de la inversión para los proveedores de asistencia sanitaria. Innovar la vía del ictus Tras el triaje inicial en el servicio de urgencias, la vía típica de tratamiento del ictus implica enviar al paciente al servicio de radiología para que se le realice un TAC o una resonancia magnética cerebral diagnóstica. Esto añade tiempo, a menudo agravado por las lagunas en la comunicación, la información y el acceso a los expertos en ictus.

Para los centros de ictus, una alternativa que ahorra tiempo es disponer de una angio-suite dedicada permanentemente en espera, a la que los pacientes con ictus puedan ser trasladados inmediatamente después de su ingreso. Utilizando imágenes de TC de haz cónico, como las que incorpora el sistema de terapia guiada por imagen de Philips -- Azurion, los clínicos pueden realizar un diagnóstico e intervenir in situ, ahorrando un tiempo precioso. El análisis de economía sanitaria indica que la inversión en una sala dedicada a la angiografía puede amortizarse en pocos años.

Tomografía computarizada de haz cónico de Philips El flujo de trabajo DTAS de Philips está habilitado por una avanzada tomografía computarizada de haz cónico (CBCT) cerebral realizada directamente en la sala de angiografía para diagnosticar a los pacientes. La CBCT utiliza un haz de rayos X en forma de cono y un detector de panel plano montado en un gantry de brazo en C similar al que se utiliza habitualmente en una sala de angiografía, capturando múltiples imágenes desde distintos ángulos para reconstruir imágenes tridimensionales del cerebro. Gracias a los avances tecnológicos, Philips ha aumentado la confianza diagnóstica de la CBCT del 32% al 93% en el espacio de unos pocos años.

Esta tecnología puede descartar hemorragias intracraneales e identificar oclusiones de grandes vasos (OVG), que representan aproximadamente entre una cuarta parte y la mitad de los ictus isquémicos agudos. Los pacientes a los que se diagnostica una OVG pueden ser operados de inmediato mediante un procedimiento mínimamente invasivo guiado por imagen conocido como trombectomía mecánica para abrir la arteria obstruida causante del ictus. Menor coste, mejores resultados para los pacientes Múltiples estudios unicéntricos han demostrado el impacto positivo de la DTAS en los resultados clínicos, por lo que muchos centros especializados en ictus ya la han adoptado.

Actualmente se está llevando a cabo un gran ensayo clínico multicéntrico aleatorizado denominado WE-TRUST (Workflow Optimization to Reduce Time to Endovascular Reperfusion for Ultra-fast Stroke Treatment) para confirmar el beneficio de DTAS para los pacientes. La cartera de productos para el tratamiento del ictus de Philips incluye soluciones para la monitorización y comunicación en ambulancias, la teleevaluación de pacientes con ictus, el diagnóstico por imagen y el análisis, la terapia guiada por imagen, la monitorización y evaluación neurológica, etc. Sus soluciones de terapia guiada por imagen para el ictus se basan en el sistema de terapia guiada por imagen de Philips -- Azurion.