El Gobierno marroquí está en conversaciones para atraer a más fabricantes de baterías eléctricas, ya que pretende adaptar su creciente sector automovilístico a una demanda cada vez mayor de vehículos eléctricos, según declaró el ministro de Industria y Comercio, Ryad Mezzour.

El sector del automóvil encabeza las exportaciones industriales de Marruecos con 14.000 millones de dólares en 2023, un 27% más.

Marruecos alberga plantas de producción de Stellantis y Renault con una capacidad de producción anual combinada de 700.000 coches, así como un grupo de proveedores locales.

La semana pasada, el gobierno marroquí dio luz verde para que el fabricante chino de baterías eléctricas BTR New Material Group construyera una fábrica cerca de Tánger para producir cátodos de componentes clave.

"Este es el primer memorando de entendimiento que transformamos en un acuerdo de inversión", dijo Mezzour en una entrevista con Reuters.

Se espera que otro fabricante chino, CNGR Advanced Material , construya una planta de cátodos en Jorf Lasfar, a 100 kilómetros al sur de Casablanca, donde el gobierno ha destinado 283 hectáreas a industrias de baterías eléctricas.

"BTR y CNGR u otras plantas podrán abastecer a las gigafábricas de Marruecos y del extranjero", afirmó.

El año pasado, el gobierno marroquí y la china Gotion acordaron estudiar la creación de una planta de baterías para vehículos eléctricos en el reino con una inversión eventual de hasta 6.300 millones de dólares.

El proyecto de Gotion avanza con las discusiones sobre la huella y la ubicación, dijo Mezzour.

"Será una gigafactoría en potencia", dijo, refiriéndose a las plantas de producción de baterías a gran escala.

También hay negociaciones en curso con otros cinco fabricantes para establecer plantas similares, dijo sin dar más detalles.

Aunque la inversión en baterías es "uno de los caminos para preparar al sector del automóvil para las exigencias de la movilidad eléctrica", el ministro dijo que los siguientes pasos serían la plataforma del coche y el electromotor.

Para 2030, está previsto que los vehículos eléctricos fabricados en Marruecos representen hasta el 60% de sus coches exportados, adelantándose a la prohibición de los coches de combustibles fósiles en la UE para 2035, afirmó.

Stellantis tiene una capacidad de producción de 50.000 coches eléctricos supermini en su planta de Kenitra.

Renault tiene previsto empezar a producir una versión híbrida del Dacia Jogger de siete plazas en la fábrica de Tánger en el segundo semestre de este año, con una capacidad de 120.000 coches anuales.

"Estamos cambiando progresivamente nuestra cadena de valor y aumentándola para estar en condiciones de suministrar a todos nuestros mercados con una cadena de valor muy competitiva e integrada", declaró Mezzour. (Reportaje de Ahmed Eljechtimi; edición de David Evans)