RENAULT Al mismo tiempo, se prevé que Saudi Aramco anuncie la firma de un memorando de entendimiento para invertir en la empresa, dijo una de las fuentes, un movimiento que confirmaría la carta de intenciones de Aramco de marzo del año pasado.
El acuerdo es clave para Renault que, a pesar de haber mejorado sus resultados, se ve eclipsada por rivales más grandes como Stellantis. Podría reforzar un negocio heredado que aún representa la mayor parte de los ingresos de Renault, mientras que la empresa también intenta avanzar con los vehículos eléctricos (VE).
Horse, la unidad de Renault, y Geely podrían acabar con un 40% de la empresa conjunta cada una, mientras que el 20% restante iría a Aramco, añadió la fuente. Las discusiones sobre la inversión precisa del grupo saudí están, sin embargo, en curso.
En julio, Renault y Geely habían dicho que la empresa se dividiría al 50%, repartiéndose la participación de Geely entre sus filiales: 33% para Aurobay y 17% para GHPT.
"Los proyectos avanzan según lo previsto, lo comunicaremos a su debido tiempo", dijo un portavoz de Renault, mientras que un portavoz de Geely declinó dar detalles sobre el calendario del acuerdo. Aramco dijo que no podía hacer comentarios inmediatamente.
La empresa alcanzará un volumen de negocio anual de 15.000 millones de euros (16.000 millones de dólares) y dará empleo a 19.000 personas en 22 centros repartidos por todo el mundo, principalmente en España, Rumanía, Turquía, Sudamérica y China.
Es uno de los dos pilares principales de la estrategia de Renault para mantenerse en la carrera contra competidores más grandes mediante la firma de múltiples asociaciones para reducir costes y acceder a nuevos mercados.
El otro pilar sufrió un bache el mes pasado cuando Renault canceló abruptamente la oferta pública inicial prevista de la unidad de vehículos eléctricos Ampere, alegando unas condiciones de mercado desfavorables.
COMPETIR CON STELLANTIS
La empresa Renault-Geely suministrará tanto a las marcas de los dos grupos como a terceros fabricantes.
Los fabricantes de automóviles y otros sectores industriales han manifestado su interés por el nuevo proveedor, según las dos fuentes.
Dijeron que eso era cierto fuera de Europa, donde muchos mercados están lejos de pasar a los VE, y también en Europa, donde algunos clientes potenciales no descartan un retraso de la prohibición de los motores de combustión en la UE para 2035.
"(El descarte de la OPV de Ampere) debería permitir que el impresionante giro de Renault en el negocio heredado vuelva a ocupar un lugar prioritario en la agenda", escribieron los analistas de BNP en una nota la semana pasada, añadiendo que esto también daría al grupo más tiempo para establecer un historial en los VE.
Según un cálculo de Reuters basado en el número de vehículos vendidos, el negocio de los vehículos de combustión y con motor híbrido representaría alrededor del 93% de las ventas de Renault en 2023, frente a alrededor del 7% de los VE puros, en los que se está llevando a cabo una renovación de la gama de modelos.
Renault, que publicará los resultados de 2023 el jueves, aspira a un margen operativo en la parte alta de su horquilla de previsión del 7%-8%, frente a menos del 6% en 2022. Su objetivo es del 8% para 2025 y del 10% para 2030.
Se espera que el flujo de caja libre operativo del sector del automóvil del año pasado sea de al menos 2.500 millones de euros.
Stellantis, nacida de la fusión entre la francesa PSA y la italiana FCA, posee 14 marcas de automóviles y es una de las más rentables del sector. El lunes desmintió las informaciones de la prensa italiana según las cuales Francia estaba presionando para fusionarse con Renault.
Se espera que Stellantis, que publicará sus resultados el mismo día que Renault, obtenga un margen operativo ajustado de dos dígitos.
(1 dólar = 0,9289 euros) (Reportaje de Gilles Guillaume Reportaje adicional de Zoey Zhang en Shanghai Redacción de Piotr Lipinski Edición de Ingrid Melander y Mark Potter)
