WIESBADEN (dpa-AFX) - El especialista en fibra de carbono SGL Carbon se benefició en el primer trimestre principalmente de la fuerte demanda de la industria de semiconductores. En los tres meses de enero a marzo, los ingresos y el beneficio operativo aumentaron en términos interanuales. El grupo lo anunció el viernes en Wiesbaden, confirmando sus previsiones para el año en curso. Esto probablemente no fue suficiente para los inversores: La acción de Hessian fue castigada por la mañana con un menos de más del cuatro por ciento. En marzo, la cotización había subido a su nivel más alto desde noviembre de 2021.

Los expertos ya habían expresado su descontento con las perspectivas actuales antes de que se presentaran las cifras. A principios de esta semana, el analista Lars Vom-Cleff, del Deutsche Bank, escribió que la reestructuración del grupo debería dar sus frutos gradualmente. Consideró que la previsión de la empresa para 2023 en cuanto al resultado de explotación (Ebitda) era conservadora, y que el objetivo de volumen de negocio a un nivel estable también requería explicaciones.

En términos de volumen de negocio, la dirección espera de nuevo un máximo de unos 1.140 millones de euros en 2023. El resultado operativo ajustado (Ebitda) se espera que se sitúe entre 160 y 180 millones de euros.

En el primer trimestre, SGL Carbon pudo aumentar sus ventas en tres de las cuatro unidades de negocio. El negocio de las fibras de carbono no obtuvo buenos resultados a principios de año. El descenso se debió a la expiración programada del contrato de suministro para el coche eléctrico BMW i3 a mediados del año pasado, según el Grupo. Desde el segundo semestre de 2022, el grupo había compensado las capacidades liberadas con pedidos de la industria eólica. Allí, la construcción está actualmente estancada debido a la escasez de permisos de construcción y a los elevados costes de fabricación.

En el primer trimestre del año, la facturación del grupo aumentó en torno a un 5% con respecto al año anterior, hasta situarse ligeramente por debajo de los 284 millones de euros. Los beneficios ajustados antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones (Ebitda) mejoraron un 9% hasta unos 40 millones de euros, gracias también a una mejor utilización de la capacidad. Con 15,3 millones de euros, el resultado final fue inferior al del año anterior. SGL Carbon lo atribuyó a los efectos especiales positivos del año anterior./knd/men/stk