HOUSTON, 19 jul (Reuters) -El Departamento del Tesoro de Estados Unidos renovó el miércoles una licencia que protege al refinador de propiedad venezolana Citgo Petroleum de acreedores que buscan apoderarse de los activos de la compañía para cobrar deudas impagas.

La renovación permitiría a la junta que supervisa Citgo continuar los esfuerzos para llegar a acuerdos de pago con casi una docena de empresas que buscan una subasta de acciones en una de las empresas matrices del séptimo mayor refinador de petróleo de Estados Unidos.

Un equipo negociador que representa al país sudamericano ha sostenido conversaciones de conciliación con algunos acreedores y tenedores de bonos de PDVSA que están en default.

Estados Unidos ha protegido a Citgo, con sede en Houston, contra acreedores desde que la compañía rompió lazos en 2019 con su casa matriz, la estatal venezolana Petróleos de Venezuela.

La licencia emitida el miércoles prohíbe transacciones con los títulos 2020 de PDVSA hasta el 19 de octubre, los cuales están respaldados con 50,1% de acciones en Citgo Holding, una de las matrices de Citgo Petroleum.

Horacio Medina, jefe de la junta que supervisa a Citgo, no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Citgo declinó comentar.

Un juez en Delaware está considerando un proceso de subasta de acciones en una de las matrices de Citgo, que podría comenzar tan pronto como en septiembre.

La subasta propuesta podría usarse para cubrir unos 2.700 millones de dólares en reclamos por expropiación de activos y otras sentencias de Crystallex International, ConocoPhillips, Siemens Energy y Red Tree Investments.

Otras seis empresas también tienen embargos condicionados a la obtención de aprobaciones de parte del Tesoro de Estados Unidos. Sus sentencias suman 3.460 millones de dólares. Las seis empresas son: O-I Glass, Huntington Ingalls Industries, ACL1 Investments, Rusoro Mining, Gold Reserve y dos unidades de Koch Industries.

El año pasado, Citgo registró una ganancia anual récord de 2.800 millones de dólares y reportó una ganancia de 937 millones de dólares en el primer trimestre, dándole espacio para negociar pagos con algunos acreedores, que en total reclaman más de 20.000 millones de dólares.

Los tenedores de los bonos 2020 ganaron hace tres años un fallo judicial que les permite cobrar 1.900 millones de dólares en pagos pendientes de capital e intereses.

Ese grupo está solicitando a un tribunal de Nueva York que autorice la disposición de los activos de refinación y transporte de Citgo en Estados Unidos para ayudar a resolver negociaciones de reestructuración de deuda.

Si PDVSA pierde una apelación con la que intenta invalidar los bonos, la jueza federal de distrito Katherine Polk Failla, en Manhattan, podría proseguir con el caso. Venezuela perdió este mes una apelación por separado que intentaba impedir que nuevos acreedores se adhirieran al caso en Delaware.

(Reporte de Marianna Párraga. Escrito por Vivian Sequera, editado por Javier Leira)