El robo de los datos de 10 millones de cuentas de clientes, que equivalen al 40% de la población australiana, fue el resultado de un error de Optus, por lo que le corresponde a la compañía, propiedad de Singapur Telecommunications, pagar las consecuencias, dijo el tesorero adjunto Stephen Jones.

"Optus es absolutamente responsable de pagar los costes y las implicaciones de esto para los clientes, ya sea la sustitución de una licencia, ya sea la sustitución de un pasaporte, u otras piezas necesarias de identificación", dijo Jones a los periodistas en Sydney. No dio una cifra en dólares de los costes.

Un representante de Optus no estaba disponible de inmediato para responder a los comentarios de Jones. Optus se ha disculpado por la infracción y ha dicho que pagará a los clientes más afectados para que reciban una supervisión de su crédito durante un año.

Los comentarios subrayan la creciente tensión entre el gobierno australiano y su segunda mayor empresa de telecomunicaciones, mientras las empresas de Internet, los bancos y las autoridades gubernamentales se esfuerzan por minimizar el riesgo de sufrir un hackeo similar.

El operador de una cuenta anónima había exigido en una sala de chat en línea un millón de dólares para abstenerse de vender los datos de los clientes de Optus, para luego retirar la demanda y disculparse, alegando una mayor publicidad. Optus y las autoridades policiales no han verificado la demanda, aunque los expertos en ciberseguridad dicen que lo más probable es que sea auténtica.

Los datos robados incluían números de pasaporte, números de carné de conducir, números de seguro médico del gobierno, números de teléfono y direcciones particulares, lo que llevó a comentaristas y legisladores a exigir la sustitución de los documentos.

Entretanto, otras grandes empresas de Internet dijeron que estaban realizando comprobaciones adicionales de ciberseguridad para reducir el riesgo de una filtración similar.

"A la luz de la reciente brecha de Optus, hemos estado trabajando estrechamente con nuestros socios de ciberseguridad y las agencias gubernamentales pertinentes para aumentar nuestros controles", dijo un portavoz del proveedor de Internet número 3, TPG Telecom Ltd, que tiene unos 6 millones de clientes.

Un portavoz de Telstra Corp, el mayor proveedor de Internet de Australia, dijo en un correo electrónico: "Seguiremos estudiando qué otras medidas tendremos que poner en marcha a medida que sepamos más sobre el incidente de Optus".