Tapestry solicitó el miércoles la aprobación de la UE para el acuerdo que crearía una potencia de la moda estadounidense para desafiar a rivales europeos más grandes como LVMH, que cotiza en París, por una mayor cuota del mercado mundial del lujo.
El organismo de defensa de la competencia de la Unión Europea puede autorizar el acuerdo con o sin condiciones tras una revisión preliminar o abrir una investigación de cuatro meses si tiene serias dudas.
Entre las marcas de Capri figuran Versace y Jimmy Choo, mientras que Tapestry es propietaria de Kate Spade y Stuart Weitzman. (Reportaje de Foo Yun Chee; edición de Milla Nissi)