Las autoridades medioambientales del estado alemán de Brandeburgo, donde Tesla tiene su gigafactoría, han aprobado la solicitud del fabricante estadounidense de vehículos eléctricos para ampliar su planta de Gruenheide, otro obstáculo superado en los planes de crecimiento del fabricante de automóviles.

La aprobación permite inicialmente a Tesla instalar una zona logística asfaltada para los nuevos vehículos, así como escaleras en su planta de prensado y un vigilante de acceso, dijeron las autoridades.

Tesla no estuvo inmediatamente disponible para hacer comentarios.

La ampliación forma parte de los planes de la empresa propiedad de Elon Musk

planes para duplicar la capacidad del sitio

a 100 gigavatios hora de producción de baterías y 1 millón de coches al año, con lo que se prepara para dominar el mercado europeo de vehículos eléctricos.

Los ecologistas y los grupos locales temen que la ampliación de la planta ponga en peligro el suministro de agua de la región, ya que se encuentra en una zona de protección del agua potable. (Reportaje de Victoria Waldersee, Redacción de Miranda Murray Edición de Madeline Chambers)