Dinamarca se ha fijado el objetivo de alcanzar las emisiones netas de carbono cero en 2045 y considera que la tecnología de captura y almacenamiento de carbono (CAC), que retira las emisiones de CO2 de la atmósfera y las almacena bajo tierra, es clave para alcanzar ese objetivo.

Los esfuerzos por promover esta tecnología han cobrado fuerza en toda Europa en los últimos años, a medida que las industrias y los gobiernos tratan de reducir las emisiones para cumplir sus objetivos climáticos.

Se espera que el proyecto Greensand, dirigido por INEOS y Wintershall, empiece a inyectar hasta 1,5 millones de toneladas de CO2 en yacimientos agotados de petróleo y gas del Mar del Norte para 2025, según el ministerio.

El proyecto prevé aumentar la capacidad a 8 millones de toneladas anuales para 2030.

El proyecto Bifrost de TotalEnergies pretende inyectar hasta 3 millones de toneladas en un yacimiento agotado de petróleo y gas a partir de 2027, y alcanzar los 5 millones de toneladas en 2030.

Las inversiones totales en los proyectos ascenderán a 445 millones de coronas danesas (64,4 millones de dólares) y 157 millones de coronas respectivamente, de los que el Estado danés invertirá algo menos de la mitad.

(1$ = 6,9054 coronas danesas)