El director general Andrei Kostin ha culpado directamente de las pérdidas del banco a las sanciones occidentales contra el sector financiero ruso. El VTB, muy expuesto a los mercados internacionales y con más del 20% de su cartera de préstamos en divisas, se vio especialmente afectado en las primeras fases del conflicto en Ucrania.

Los resultados del miércoles, publicados con arreglo a las normas internacionales de información por primera vez en más de un año, revelan fuertes pérdidas en las operaciones con divisas y metales preciosos, así como enormes provisiones.

El VTB registró una pérdida neta de 612.600 millones de rublos (7.730 millones de dólares), por debajo del beneficio récord de 327.400 millones de rublos registrado en 2021. Las acciones del banco, que cotizan en Moscú, cayeron alrededor de un 5%.

Los costes de provisiones aumentaron un 343,3% hasta los 514.300 millones de rublos y los ingresos netos por intereses se desplomaron un 50,3% hasta los 321.000 millones de rublos.

PROBLEMAS DE CAPITAL

VTB está resolviendo sus problemas de capital completando sus activos. Compró a su rival Otkritie por 340.000 millones de rublos al banco central ruso a finales del año pasado y planea una segunda emisión adicional de acciones este trimestre, en la que prevé recaudar entre 50.000 y 125.000 millones de rublos.

"El estrés ha pasado, las lágrimas se han derramado", declaró a la prensa el vicepresidente del consejo de administración y director financiero, Dmitry Pyanov, quien añadió que la trayectoria de la recuperación de beneficios permitirá a VTB repetir el año 2021 en términos de beneficios récord.

VTB destinará los beneficios a la recuperación de capital y no tiene previsto pagar dividendos sobre los resultados de 2023, aunque esa decisión se concretará a mediados de 2024, dijo Pyanov, que prevé un crecimiento de la cartera de préstamos de alrededor del 12% en 2023.

Los bancos rusos se han recuperado tras una caída colectiva de los beneficios del 90% el año pasado, con los prestamistas compitiendo ahora por el negocio del Estado, en particular un presupuesto de defensa floreciente, y las grandes cuentas corporativas del país.

Bloqueado del sistema internacional de pagos SWIFT y obligado a cerrar operaciones en toda Europa, VTB ha reconocido el impacto de las sanciones, algo a lo que Moscú ha intentado restar importancia.

Pyanov explicó cómo los reguladores europeos habían privado esencialmente al banco del control accionarial sobre sus entidades de Fráncfort y Londres. La enajenación de esas filiales costó a VTB 229.000 millones de rublos antes de impuestos.

Las medidas impuestas por Rusia también tuvieron su parte de culpa. Las provisiones para pérdidas crediticias ascendieron a 344.000 millones de rublos antes de impuestos, en parte debido a que el prestamista tuvo que conceder vacaciones para el pago de préstamos a las tropas movilizadas que luchan en Ucrania, dijo Pyanov.

(1$ = 79.3000 rublos)