Wacker Chemie AG está ampliando sus capacidades de fabricación de siliconas especiales en China. Un acto inaugural en las instalaciones de Zhangjiagang, en la provincia de Jiangsu, marca el inicio de la construcción de varias líneas de producción nuevas, en las que el grupo químico que opera a nivel mundial fabricará fluidos de silicona funcionales, emulsiones de silicona y geles de elastómeros de silicona. Se han previsto inversiones de unos 150 millones de euros para el proyecto de ampliación.

El proyecto ya ha recibido todos los permisos necesarios de las autoridades locales. Está previsto que las nuevas instalaciones entren en funcionamiento en la segunda mitad de 2025. La ampliación de la capacidad en Zhangjiagang, señaló, es el siguiente paso lógico en la estrategia del Grupo de seguir haciendo de las siliconas especiales una parte más importante de su cartera de productos.

Las emulsiones de silicona y los geles elastómeros de WACKER se utilizan normalmente en aplicaciones textiles, cosméticas y de cuidado personal, como cremas para la piel, champús y suavizantes de tejidos. Aquí evitan que el maquillaje manche la ropa, reducen el impacto negativo que el contacto con el agua tiene sobre la protección solar y permiten que las cremas hidratantes y de noche se mantengan agradablemente suaves como la seda. Por otro lado, los fluidos de silicona funcionales son importantes materiales de partida para aplicaciones industriales como agentes impregnantes o desmoldeantes.

Otras aplicaciones de los fluidos de silicona incluyen su uso como aditivos para la construcción, el papel, las pinturas y los revestimientos. Zhangjiagang es uno de los grandes centros de producción totalmente integrados del Grupo WACKER. Desde aquí, la empresa suministra a los mercados asiáticos en rápido crecimiento una amplia gama de productos derivados de la silicona, como sellantes, elastómeros, emulsiones y fluidos.

Las siliconas de WACKER se utilizan no sólo en áreas de aplicación tradicionales, como las industrias textil, del cuero y de fibras, y para procesos químicos y revestimientos. También desempeñan un papel clave en industrias especialmente innovadoras, como la electromovilidad, la generación de energía renovable y la tecnología médica.