El aumento de la inflación y la rápida subida de los tipos hipotecarios han empezado a pesar en el mercado de la vivienda, ya que la compra de casas se vuelve más costosa, golpeando lo que hasta el año pasado era un sector en auge.

La refinanciación también se ha visto presionada por la agresiva campaña de endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos.

Las últimas reducciones en la unidad de hipotecas del prestamista se suman a las miles ya realizadas por Wells Fargo este año, según el informe de Bloomberg.

El banco no respondió inmediatamente a una solicitud de Reuters para comentar el informe.

En junio, JPMorgan Chase & Co, el mayor banco estadounidense por activos, también había comenzado a despedir empleados en su negocio hipotecario.