VARSOVIA/MOSCÚ, 22 feb (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunirá el miércoles con los dirigentes del flanco oriental de la OTAN en una muestra de apoyo después de que el presidente de Rusia suspendiera un tratado de control de armas nucleares y acusara a Estados Unidos de convertir la guerra de Ucrania en un conflicto mundial.

El martes, en Polonia, Biden proclamó su apoyo inquebrantable a Ucrania y a la OTAN, que Rusia considera una amenaza existencial.

"Cuando Rusia invadió, no solo se puso a prueba a Ucrania. El mundo entero se enfrentó a una prueba histórica", dijo Biden en el Castillo Real de Varsovia, al día siguiente de realizar una visita sorpresa a Kiev.

Ante el reto de responder a la invasión rusa iniciada el 24 de febrero del año pasado, Biden dijo que Estados Unidos y sus aliados de la OTAN respondieron: "Sí, defenderíamos la soberanía. Y lo hicimos. Sí, defenderíamos el derecho de las personas a vivir libres de agresiones. Y lo hicimos".

"Y defenderíamos la democracia. Y lo hicimos", afirmó.

"No debe haber ninguna duda: Nuestro apoyo a Ucrania no vacilará, la OTAN no se dividirá y no nos cansaremos", afirmó Biden.

También el martes, el presidente ruso Vladimir Putin hizo una advertencia a Occidente sobre Ucrania al suspender el último gran tratado de control de armas nucleares que mantenía con Estados Unidos.

Putin dijo a la élite militar y política rusa en Moscú que Estados Unidos estaba convirtiendo la "operación militar especial" de Ucrania en un conflicto mundial y anunció la suspensión de la participación de Rusia en el Nuevo START (Tratado de Reducción de Armas Estratégicas).

Más tarde, el Ministerio ruso de Asuntos Exteriores dijo que tenía la intención de seguir respetando las restricciones establecidas en el tratado sobre el número de cabezas nucleares que podía desplegar.

"Las élites de Occidente no ocultan su propósito. Pero tampoco pueden dejar de darse cuenta de que es imposible derrotar a Rusia en el campo de batalla", dijo Putin.

"Pretenden transformar un conflicto local en una fase de confrontación global", dijo. "Así es exactamente como lo entendemos todo y reaccionaremos en consecuencia, porque en este caso estamos hablando de la existencia de nuestro país".

Biden rechazó la afirmación de Rusia de que los aliados occidentales trataban de controlar o destruir a Rusia. Por su parte, acusó a Rusia de crímenes contra la humanidad, como ataques contra civiles y violaciones.

Rusia ha negado las acusaciones de Ucrania y sus aliados de crímenes de guerra y ataques contra civiles.

EN BUSCA DE UNA SOLUCIÓN

El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, afirmó que la suspensión del tratado nuclear por parte de Putin era "profundamente desafortunada e irresponsable". El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que convertía el mundo en un lugar más peligroso, e instó a Putin a reconsiderarlo.

El embajador chino ante la ONU, Zhang Jun, dijo a la prensa que el Nuevo START y otros instrumentos eran importantes para la arquitectura de la seguridad mundial, y añadió: "Las partes implicadas deben seguir negociando para encontrar una buena solución".

Según el tratado, que expira en 2026, Estados Unidos y Rusia pueden controlar físicamente el arsenal nuclear del otro, aunque las tensiones en torno a Ucrania ya habían paralizado las inspecciones.

Los aliados de la OTAN y otros partidarios han enviado a Ucrania decenas de miles de millones de dólares en armamento de guerra y munición, con la promesa de carros de combate modernos y mientras algunos consideran las peticiones del presidente Volodímir Zelenski sobre aviones de combate y misiles de mayor alcance.

El miércoles, Biden se reunirá con los dirigentes de los Nueve de Bucarest, los miembros orientales de la OTAN que se unieron a la alianza tras años de dominio de la entonces Unión Soviética durante la Guerra Fría. La mayoría se encuentran entre los más firmes partidarios de la ayuda militar a Ucrania y han pedido más ayuda para este país, como sistemas de defensa antiaérea.

Se espera que Biden reafirme sus compromisos de seguridad y hable del apoyo a Ucrania antes de regresar a Washington.

COMBATES

Rusia sufrió tres importantes reveses en el campo de batalla de Ucrania el año pasado, pero sigue controlando alrededor de una quinta parte del país y parece estar avanzando en las provincias orientales.

Cerca de la ciudad de Bajmut, foco de los avances rusos en la región oriental de Donetsk, 18 pueblos y aldeas estaban bajo fuego, según informó el ejército ucraniano a última hora del martes.

El Ministerio ruso de Defensa dijo que su ejército había logrado un avance de 2,5 km (1,5 millas) hacia Bajmut, considerado por el Kremlin como un puesto de parada principal en la captura de otras ciudades más al oeste de Donetsk.

"Es muy importante que, a pesar de la gran presión sobre nuestras fuerzas, la línea del frente no haya sufrido ningún cambio", dijo Zelenski en un discurso grabado en vídeo.

El jefe de los mercenarios rusos, Yevgeni Prigozhin, reprendió a los líderes militares rusos, acusándolos de privar a sus combatientes de Wagner del acceso a municiones en lo que describió como un intento traicionero de destruir su empresa militar. El Ministerio de Defensa rechazó su acusación sobre el bloqueo de munición por considerarla "absolutamente falsa".

Reuters no pudo verificar las informaciones sobre el campo de batalla.

La mayor guerra territorial en Europa desde la Segunda Guerra Mundial ha desplazado a millones de personas, ha dejado en ruinas ciudades, pueblos y aldeas ucranianos y ha desestabilizado la economía mundial. Más de 8.000 civiles han muerto, según la oficina de derechos humanos de la ONU, que añadió que se estima que han muerto miles de personas más.

(Reporte de las oficinas de Reuters; redacción de Grant McCool; editado en español por Flora Gómez)