La administración Biden afirmó el miércoles su apoyo a una Reserva Federal independiente, después de que el mes pasado saliera a la luz un informe según el cual el candidato presidencial republicano Donald Trump está evaluando formas de ejercer un mayor control sobre la política monetaria estadounidense.

En una entrada de blog publicada el miércoles, el Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca expuso la evidencia histórica de que los bancos centrales en deuda con los políticos sirven mal a sus economías, y que los bancos centrales independientes obtienen mejores resultados en el control de la inflación.

"En la administración Biden estamos muy motivados por esta historia y continuaremos nuestro apoyo inquebrantable a la CBI (independencia de los bancos centrales)", decía el blog del CEA. "La historia no podría ser más clara en cuanto a las duraderas y perjudiciales consecuencias inflacionistas de ignorar esta lección o de revertir el progreso duramente ganado en el último medio siglo".

Se trata de una opinión ampliamente aceptada por los economistas, declarada anteriormente por el presidente de la CEA, Jared Bernstein, y subrayada con regularidad por los propios responsables políticos de la Reserva Federal, incluido su presidente, Jerome Powell, que junto con los líderes de la mayoría de los bancos centrales mundiales lleva más de dos años librando una campaña de lucha contra la inflación.

Durante su mandato presidencial 2016-2020, Trump elevó a Powell al puesto más alto de la Fed, pero más tarde expresó su enfado y frustración porque el banco central no redujera los tipos de interés para impulsar la economía cuando él consideraba que debía hacerlo.

Trump ha apuntado contra el presidente estadounidense, Joe Biden, que compite con el ex presidente republicano por la reelección en noviembre, por permitir que la inflación se mantenga alta, y ha dicho que cree que Powell reducirá los tipos de interés para ayudar a la candidatura de reelección de Biden.

La inflación estadounidense alcanzó su punto máximo a mediados de 2022, en torno al 7%, y desde entonces ha caído hasta aproximadamente la mitad, pero la Fed tiene como objetivo el 2% y los responsables políticos han dicho que no recortarán los tipos hasta que tengan una mayor confianza en que la inflación se dirige hacia ese objetivo.

El blog del CEA atribuye a la independencia de la Fed su capacidad para bajar la inflación tanto como lo ha hecho sin dañar mucho el mercado laboral.