Las acciones europeas subieron, ayudadas por las ganancias de los valores de lujo, y los futuros de las acciones estadounidenses apuntaban a un comienzo firme para Wall Street más tarde en el día .
Sin embargo, a medida que el tercer trimestre se acercaba a su fin, las bolsas mundiales se vieron arrastradas a fuertes pérdidas por el aumento de los rendimientos de los bonos.
Los mercados de bonos se mantuvieron estables en líneas generales, pero también están poniendo fin a un trimestre tórrido. Los rendimientos de la deuda pública de la zona euro, que junto con los rendimientos del Tesoro estadounidense han alcanzado nuevos máximos de varios años esta semana, se encaminan a su mayor subida trimestral en un año.
"Los rendimientos son demasiado altos y bajarán, pero estamos en ese intervalo entre ahora y cuando eso ocurra", dijo James Rossiter, jefe de estrategia macroeconómica mundial de TD Securities en Londres.
"Da la sensación de que los rendimientos (del Tesoro estadounidense a 10 años) podrían llegar al 5%, pero en última instancia se moverán a la baja".
En el comercio londinense del viernes, el rendimiento del Tesoro estadounidense a 10 años bajaba 5 puntos básicos (pb) al 4,54%, tras haber subido el jueves a máximos de 16 años.
El rendimiento de la deuda pública alemana a 10 años, la referencia de la zona euro, caía 10 pb hasta el 2,86% tras haber subido 13,5 pb el día anterior. Aún así, terminaría la semana con una subida de 14 puntos básicos, en su mayor subida semanal desde principios de julio.
Mientras tanto, la deuda pública británica, que también se vendió con fuerza el jueves, se recuperó.
Los resultados económicos de Gran Bretaña desde el inicio de la pandemia de COVID-19 han sido más sólidos de lo que se pensaba, con un crecimiento más rápido que el de Alemania o Francia, según las revisiones de los datos oficiales publicadas el viernes.
Las acciones asiáticas ganaron más de un 1% en su mejor día en semanas , pero seguían camino de su peor resultado trimestral en un año, al igual que las acciones europeas y el índice bursátil mundial MSCI.
El Nikkei japonés cerró un poco a la baja, mientras que los mercados chinos permanecieron cerrados por festivo y se tomarán un descanso la próxima semana.
El sector inmobiliario chino permaneció en el punto de mira después de que China Evergrande Group dijera que su fundador está siendo investigado.
Los inversores están pendientes del índice de precios de gastos de consumo personal de Estados Unidos y de los datos de inflación de la zona euro.
También se centró la atención en Washington, donde el Senado estadounidense, liderado por los demócratas, avanzó el jueves con un proyecto de ley bipartidista de financiación provisional destinado a evitar un cuarto cierre parcial del gobierno en una década, mientras que la Cámara de Representantes comenzó a votar proyectos de ley de gastos republicanos partidistas sin posibilidades de convertirse en ley.
Los caminos divergentes de las dos cámaras aumentaron las probabilidades de que las agencias federales se queden sin dinero el domingo, suspendiendo a cientos de miles de trabajadores federales y paralizando una amplia gama de servicios.
"La gente se está acostumbrando a los cierres parciales, pero si se prolongan y aumentan las apuestas, entonces las consecuencias económicas empiezan a acumularse", dijo el estratega jefe de mercados de Nordea, Jan von Gerich, añadiendo que el dólar podría verse perjudicado si no se llega a un acuerdo en Washington.
El índice del dólar cedió un 0,40% hasta 105,79, pero rondó los máximos de 10 meses de 106,84 tocados a principios de esta semana. El índice ha subido aproximadamente un 2% este mes y se apunta su segundo mes consecutivo de ganancias.
El yen japonés se situó en 148,93 por dólar, ganando un respiro por ahora con los mercados en alerta ante una posible intervención de las autoridades japonesas.
La inflación subyacente en la capital de Japón se ralentizó en septiembre por tercer mes consecutivo debido principalmente a la caída de los costes del combustible, según mostraron los datos el viernes, lo que sugiere que las presiones de los costes están empezando a tocar techo, en un alivio para la frágil recuperación económica.
Los precios del petróleo recuperaron terreno tras una breve pausa alcista, ya que los operadores sopesaron las expectativas de un aumento de la oferta por parte de Rusia y Arabia Saudí frente a las previsiones de una demanda positiva por parte de China durante sus vacaciones de la Semana Dorada.
El crudo estadounidense subió un 0,2%, hasta 91,88 dólares por barril, y el Brent se situó en 95,22 dólares, con pocos cambios en la jornada.
Los precios del oro se preparaban para su mayor caída mensual desde febrero, rondando mínimos de seis meses. El oro al contado subió un 0,4% hasta los 1.872 dólares la onza.
