La gobernadora del banco central de Turquía, Hafize Gaye Erkan, dimitió el viernes, alegando en parte la necesidad de proteger a su familia en medio de un "asesinato de su reputación", lo que plantea interrogantes en torno a la agresiva política de endurecimiento monetario que defendió.

El ministro de Finanzas, Mehmet Simsek, declaró en otro comunicado que el programa económico continuará sin interrupción y que la dimisión de Erkan era una decisión personal suya.

Erkan, la primera mujer que dirige el banco, fue nombrada por el presidente Tayyip Erdogan en junio para ejecutar un giro de 180 grados y alejarse de años de políticas poco ortodoxas de tipos bajos que dispararon la inflación y provocaron la huida de los inversores extranjeros.

Desde junio, el banco central había subido su tipo de interés básico al 45% desde el 8,5% bajo la dirección de Erkan.