La tasa de inflación anual de Canadá bajó al 6,9% en septiembre, según los datos de Statistics Canada.

Se trata de la tercera desaceleración mensual consecutiva, pero un peldaño por encima de las previsiones de los analistas del 6,8%, mientras que las medidas de las presiones de los precios subyacentes no se suavizaron.

Los mercados monetarios ven un 66% de posibilidades de que el Banco de Canadá suba los tipos de interés en tres cuartos de punto porcentual en su próxima decisión política del 26 de octubre, frente a un 30% antes de los datos.

La inflación en el Reino Unido también estuvo caliente, lo que presionó a los mercados financieros mundiales y ayudó a impulsar las ganancias del dólar estadounidense, que es un refugio seguro, frente a una cesta de divisas importantes.

El dólar canadiense bajó un 0,2% y se situó en 1,3770 por dólar, o 72,62 centavos de dólar, después de haber cotizado en un rango de 1,3719 a 1,3800.

Mientras tanto, los precios del crudo estadounidense subían un 0,7%, a 83,37 dólares el barril, ya que las señales alcistas, como la caída de las existencias de crudo en Estados Unidos, fueron contrarrestadas por factores bajistas, como el incierto crecimiento de la demanda china. El petróleo es una de las principales exportaciones de Canadá.

Los rendimientos de los bonos del gobierno canadiense subieron en toda la curva, siguiendo el movimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos. El bono a 10 años subió 11,8 puntos básicos hasta el 3,474%, acercándose al máximo de su rango desde junio.