Simandou, que será la mina de mineral de hierro nueva más grande y de mayor ley del mundo, ha sido objeto de prolongadas negociaciones debido a su compleja estructura de propiedad, los retrasos causados por las disputas legales, la agitación política de Guinea y las dificultades en torno a la construcción.

El Consejo Nacional de Transición, que actúa como parlamento bajo el régimen interino de Guinea, votó a favor de aprobar las leyes que ratifican el acuerdo, que prevé la finalización de la construcción para finales de 2024, según declaró a los periodistas el portavoz del consejo, Mory Dounoh, tras la votación.

Rio Tinto es propietaria de dos de los cuatro bloques mineros de Simandou como parte de su empresa conjunta Simfer con la china Chalco Iron Ore Holdings (CIOH) y el gobierno de Guinea. Rio Tinto posee una participación del 53%, mientras que CIOH posee el resto.

Los otros dos bloques mineros están siendo explotados por Winning Consortium Simandou (WCS), formado por Winning International Group, con sede en Singapur, Weiqiao Aluminium -parte de China Hongqiao Group 1378.HK- y United Mining Suppliers.