Surgalign se declaró en quiebra con unos activos y pasivos estimados entre 50 y 100 millones de dólares ante el Tribunal de Quiebras del Distrito Sur de Texas.

La empresa, con sede en Deerfield (Illinois), declaró en marzo que había reducido su plantilla alrededor de un 20% y recortado los gastos no esenciales, además de reajustar los recursos.

En noviembre del año pasado, la empresa aprobó un plan de reestructuración corporativa, que incluía el cese de algunas de sus unidades de menor rendimiento, así como la intención de continuar con sus programas de racionalización de marcas y productos.