Los dólares australiano y neozelandés trataban de encontrar un suelo el miércoles tras fuertes caídas, a la espera del testimonio del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, que podría dar forma a las expectativas de más subidas de tipos en el futuro.

El dólar australiano apenas variaba a 0,6791 dólares, tras haber caído un 0,9% durante la noche hasta alcanzar los 0,6754 dólares. No ha logrado superar el nivel de resistencia de los 69 centavos en las últimas sesiones tras una carrera alcista desde sus mínimos de 2023, pero goza de apoyo en la media móvil de 200 días de 0,6693 dólares.

El kiwi subió un 0,1% a 0,6175 dólares, tras caer un 0,5% durante la noche, hasta un mínimo de 0,6135 dólares. Tiene soporte en los 0,6154 dólares, mientras que la resistencia principal se sitúa en los 0,6247 dólares.

Sobre el Aussie han pesado las actas de la reunión de política monetaria de junio del Banco de la Reserva de Australia (RBA), publicadas el martes, en las que se echó en falta una orientación sobre nuevas subidas, una señal que los mercados interpretaron como pesimista.

La falta de medidas concretas de estímulo por parte de Pekín, en medio de las crecientes expectativas del mercado, también pesó sobre las dos divisas de las Antípodas. El yuan offshore se hundió el miércoles en un nuevo mínimo de siete meses de 7,2 por dólar.

De cara al futuro, Powell se enfrenta a los legisladores en dos días de comparecencias y seguramente será cuestionado sobre si realmente los tipos volverán a subir en julio y alcanzarán un máximo en un rango del 5,5%-5,75% como se había previsto.

"El camino de menor resistencia son nuevos descensos del AUD/USD. El AUD/USD podría caer por debajo de 0,6700 esta semana, sobre todo si el presidente del FOMC, Powell, se muestra halcón", afirmó Joseph Capurso, estratega de divisas del Commonwealth Bank of Australia.

"Consideramos que la actual política monetaria muy restrictiva en las economías avanzadas aumenta el riesgo de que se deteriore el apetito por el riesgo, el capital de cartera abandone los mercados emergentes y el AUD/USD ceda parte de sus recientes ganancias".

A los bonos nacionales les fue mejor, siguiendo a sus homólogos mundiales ante los indicios de que la campaña mundial de endurecimiento podría estar llegando a su fin.

Los rendimientos de los bonos australianos a tres años bajaron 6 puntos básicos hasta el 3,927%, el nivel más bajo en cuatro sesiones, mientras que los rendimientos a 10 años también cayeron 6 puntos básicos hasta el 3,969%. (Reportaje de Stella Qiu; Edición de Jacqueline Wong)