Lanzados hace más de cuatro décadas para fomentar la fidelidad a la marca de las aerolíneas, los programas se han convertido en un generador de efectivo para las compañías a través de la venta de millas a terceros asociados, en su mayoría bancos emisores de tarjetas de crédito que conceden las millas a sus propios clientes. Cuanto más gastan los clientes, más millas ganan y más pagan los socios a las aerolíneas.

Las actividades no relacionadas con el vuelo representan ahora más de la mitad de las millas obtenidas en los principales programas de fidelización, señaló Evert de Boer, socio gerente de la consultora On Point Loyalty, lo que hace a las aerolíneas más resistentes a los vaivenes económicos.

El porcentaje de ingresos generados por los programas de fidelización se disparó hasta el 16% en 2021 desde aproximadamente el 12% en 2019 en las cinco grandes aerolíneas estadounidenses: Delta Air Lines, American Airlines, United Airlines, Southwest Airlines y Alaska Airlines, según datos de la consultora IdeaWorksCompany.

La gente redujo sus vuelos durante la pandemia, pero siguió gastando en tarjetas de crédito de fidelización de aerolíneas, dijo el vicepresidente de JetBlue, Chris Buckner.

Él y otros ejecutivos esperan que esa tendencia continúe si la ralentización de la economía reduce la demanda de viajes.

"El gasto con tarjetas de crédito no va a desaparecer", dijo el vicepresidente de Southwest Airlines, Jonathan Clarkson.

Delta generó 5.700 millones de dólares en ventas en efectivo el año pasado procedentes de American Express y otros socios, lo que equivale al 14% de los ingresos por pasajeros de 2022, según cálculos de Reuters.

Del mismo modo, American Airline recibió 4.500 millones de dólares en pagos en efectivo de sus socios, entre ellos Citi y Barclays, lo que equivale al 10% de los ingresos por pasajeros.

Las aerolíneas están intentando generar aún más efectivo de estos programas mediante la firma de nuevas asociaciones.

United se ha asociado con empresas como el proveedor de software antivirus Norton y la firma de seguridad doméstica SimpliSafe. Alaska está concediendo 50.000 millas a sus clientes por conseguir préstamos para la vivienda de una compañía hipotecaria. JetBlue se ha asociado con empresas de equipajes.

Delta tiene alianzas con Starbucks y la empresa de entrega de comestibles Instacart, entre otras.

Los programas de fidelización de las aerolíneas también son muy rentables.

Un estudio realizado por Frankie O'Connell, profesor de gestión del transporte aéreo en la Universidad de Surrey (Inglaterra), ha descubierto que el rendimiento del capital invertido en estos programas por American, United y Delta es superior al 60%, muy por encima del 5% de rentabilidad de su negocio en general.

"Es una mina de oro de ingresos recurrentes por poco o ningún esfuerzo", dijo O'Connell.