Dinamarca se sumó la semana pasada a una declaración de Estados Unidos en la que se advertía a los Houthis de que pusieran fin a sus ataques contra la navegación comercial en el Mar Rojo.

"Nos pasará una factura enorme si los Houthis consiguen alejar el tráfico marítimo internacional del Mar Rojo y del Canal de Suez. El 12% de todos los buques civiles navegan precisamente por ese estrecho", declaró Lokke Rasmussen.

Maersk dijo a principios de este mes que estaba desviando todos los portacontenedores de las rutas del Mar Rojo alrededor del Cabo de Buena Esperanza en África para el futuro previsible, y advirtió a los clientes que se prepararan para una interrupción significativa.