El sistema aéreo no tripulado (UAS) STRIX de 2,6 metros por 4,5 metros (8,5 pies por 14,8 pies), presentado en el Salón Aeronáutico de Avalon, será capaz de realizar ataques aire-tierra, vigilancia y reconocimiento en "entornos de alto riesgo".

Se está trabajando en un prototipo, cuyo servicio operativo será posible en 2026, declaró Ben Hudson, director ejecutivo de BAE Systems Australia, filial al cien por cien de BAE Systems, la mayor empresa de defensa británica.

"Nos entusiasma que éste sea el primer UAS de este tipo que se desarrolla en Australia y esperamos trabajar con socios de todo el país para ofrecer esta capacidad a los clientes", declaró Hudson.

Desarrollado junto con Innovaero, con sede en Perth, el STRIX podrá transportar una carga útil de hasta 160 kilogramos (353 libras) a lo largo de 800 kilómetros, y despegar y aterrizar verticalmente. Puede almacenarse en contenedores de transporte.

El dron también puede actuar como "fiel compañero de ala" de los helicópteros militares, trabajando junto a las aeronaves tripuladas, más caras.

La directora del programa de BAE Systems, Natalie Waldie, afirmó que el STRIX podría exportarse a naciones aliadas y que había habido un gran interés por parte de dos clientes internacionales no identificados.

La empresa ha estado en contacto con las Fuerzas de Defensa australianas, pero añade que el dron no se ha desarrollado en respuesta a una licitación.

BAE Systems Australia también suministrará una nueva munición guiada de precisión de bajo coste, conocida como RAZER, utilizable con el STRIX.