WASHINGTON/DUBLÍN, 30 ene (Reuters) - Boeing dijo el lunes que retiraba una solicitud de exención de seguridad clave que podría haber permitido a los reguladores estadounidenses acelerar la certificación de su 737 MAX 7, en la más reciente secuela de la crisis en curso del fabricante de aviones.

Congresistas estadounidenses habían estado presionando al fabricante de aviones para que retirara la petición tras el reventón de una cabina en pleno vuelo el 5 de enero, que ha puesto de manifiesto numerosos problemas de seguridad y control de calidad en uno de los dos principales fabricantes de aviones del mundo.

La retirada, de la que informó en primer lugar Reuters, pone en entredicho el calendario previsto para la certificación del MAX 7 de Boeing y del MAX 10, más grande y con más ventas, ya que puede obligar a Boeing a realizar cambios de diseño más rápidamente de lo que había planeado.

El consejero delegado, David Calhoun, retiró la solicitud de exención después de que se le pidiera que lo hiciera en reuniones en el Capitolio la semana pasada, mientras Boeing lidia con crecientes preocupaciones de seguridad tras el incidente en pleno vuelo de un avión 737 MAX 9 operado por Alaska Airlines .

Nadie murió en el reventón que dejó a los pasajeros mirando al vacío a 16.000 pies de altura y obligó a los pilotos a realizar un aterrizaje de emergencia. Pero el incidente se ha convertido en toda una crisis de seguridad y de reputación para Boeing, que ralentizará la producción de aviones y corre el riesgo de ceder más cuota de mercado a Airbus .

Después de que su familia de aviones MAX, la más vendida, reanudara el servicio tras dos accidentes mortales, Boeing había pronosticado en un momento dado que obtendría la aprobación para los MAX 7 y 10 a finales de 2022. El jefe de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) se ha negado en repetidas ocasiones a fijar un calendario para la aprobación.

Los continuos retrasos han postergado los planes de flota de las principales aerolíneas, como Southwest Airlines y United Airlines , los principales clientes de los MAX 7 y MAX 10 respectivamente.

La decisión de Boeing de retirar la solicitud de exención se produjo antes de sus resultados del cuarto trimestre del miércoles.

La exención habría permitido certificar el MAX 7 antes de introducir cambios de diseño en la estructura de entrada de la góndola y en el sistema antihielo del motor para evitar un sobrecalentamiento que podría provocar daños graves o el fallo del barrilete interior de entrada del motor.

El MAX 10 también requerirá cambios de diseño si no se solicita una exención. Una góndola es la estructura que sostiene el motor de un avión.

Boeing propuso originalmente que la exención del MAX 7 se extendiera hasta mayo de 2026, el periodo de tiempo que la compañía creía necesario para desarrollar y certificar los cambios de diseño, pero la aprobación de la solicitud quedó en entredicho tras el accidente de Alaska Airlines.

"Aunque confiamos en que la exención de tiempo limitado propuesta para ese sistema siga los procesos establecidos por la FAA para garantizar un funcionamiento seguro, en su lugar incorporaremos una solución de ingeniería que se completará durante el proceso de certificación", dijo Boeing en un comunicado, sin proporcionar una estimación de cuánto tiempo llevaría.

La FAA remitió sus comentarios a Boeing.

(Reporte de Valerie Insinna y David Shepardson en Washington y Abhijith Ganapavaram en Bengaluru; reporte adicional de Tim Hepher en Dublín y Allison Lampert en Montreal; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)