El consejero delegado de Boeing, Dave Calhoun, afirmó el jueves que el fabricante de aviones estadounidense apoya la decisión de la Administración Federal de Aviación (FAA) de prohibirle ampliar la producción de sus aviones 737 MAX más vendidos, a raíz de unos problemas de calidad "inaceptables".

Calhoun dijo a Reuters en una breve entrevista tras una reunión en el Capitolio que apoyaba la decisión de la FAA y añadió que "no hay duda" de que la agencia tiene autoridad para imponer la restricción de aumentar la producción. "Todos queremos aviones seguros. Este es un avión seguro", dijo Calhoun. (Reportaje de David Shepardson, Edición de Franklin Paul)