La compañía india Akasa Air confía en que las entregas de los aviones Boeing 737 MAX que ha encargado llegarán a tiempo, según ha declarado su consejero delegado, a pesar de la preocupación por el calendario de producción de los 737 del fabricante de aviones estadounidense, en medio de un intenso escrutinio tras un incidente en pleno vuelo ocurrido este año.

La aerolínea más reciente de la India anunció en enero un pedido de 150 Boeing 737, en una apuesta a lo grande por sus operaciones internacionales. El anuncio del pedido se produjo días después del reventón de un panel de cabina en pleno vuelo de Alaska Air.

Aunque el pedido de Akasa no incluye la versión 737 Max 9 que ha estado en el punto de mira tras el incidente, un escrutinio interno más amplio de la compañía e investigaciones externas en EE.UU. han hecho temer que los plazos de entrega de otras variantes del programa de aviones 737 de Boeing puedan verse afectados.

"Estamos en contacto muy, muy estrecho con Boeing. Nuestro calendario de entregas se ajusta a las expectativas y a los acuerdos que desarrollamos con ellos", declaró Vinay Dube, fundador y director ejecutivo de Akasa, a Reuters en una entrevista el miércoles.

La flota actual de Akasa incluye 24 aviones Boeing del total de 226 que tiene encargados y cuya entrega está prevista a lo largo de 8 años. Dube declinó dar un desglose por años.

El 28 de marzo, Akasa pondrá en marcha su primer vuelo internacional a Doha desde Bombay, al que seguirán otros destinos de Oriente Próximo, como Kuwait, Riad y Yeda, y después algunos países del sudeste asiático.

Aunque India es actualmente el mercado de la aviación de más rápido crecimiento del mundo, con una demanda de viajes que supera la oferta de aviones, el grueso del tráfico internacional lo captan compañías globales como Emirates.

Aunque Dube no compartió detalles sobre cuánta capacidad desplegará la aerolínea en rutas extranjeras, dijo que la ambición es crecer internacionalmente "muy rápido" debido a los costes comparativamente más bajos y los mayores ingresos frente a los nacionales.

"Los ingresos internacionales tienden a mantenerse un poco mejor durante un periodo de tiempo. Nos vería ser un poco más agresivos en internacional de lo que quizás han sido históricamente otras aerolíneas", añadió.

IndiGo, rival de Akasa, realizó en junio un pedido récord de 500 aviones Airbus de fuselaje estrecho, eclipsando la compra de Air India de 470 reactores combinados de Airbus y Boeing a principios del año pasado.

Estas aerolíneas están apostando fuerte por el crecimiento del transporte aéreo en la India, un país en el que ya escasean los pilotos. Go First, una aerolínea de bajo coste, se encuentra en proceso de quiebra, mientras que SpiceJet ha luchado contra la falta de liquidez en los últimos meses.

En la India, dijo Dube: "el mayor reto es dirigir una buena aerolínea".