ERAMET 
La planta de 870 millones de dólares, una empresa conjunta con el gigante chino del níquel y el acero Tsingshan, será probablemente una de las primeras del mundo en utilizar un innovador sistema de procesamiento denominado extracción directa de litio, o DLE, a escala comercial.
Eso la convierte en una prueba clave para la prometedora tecnología que ayuda a acelerar la producción de litio, incluso cuando los gobiernos y los fabricantes de automóviles corren para asegurarse el suministro del metal ultraligero necesario para muchas de las baterías que alimentan los vehículos eléctricos.
Argentina, que se encuentra en el llamado "triángulo del litio" de Sudamérica, es el cuarto productor mundial del metal y pretende acelerar la producción con una serie de nuevos proyectos que entrarán en funcionamiento a finales de este año.
El proyecto Centenario de Eramet, en el norte de la provincia de Salta, está llamado a ser el primero en iniciar la producción, con la empresa probando ahora el equipo y los procesos de producción en una fase clave conocida como puesta en marcha.
Eramet, que posee el 50,1% del proyecto, está solicitando permisos para una segunda planta con una capacidad de 30.000 toneladas, y es probable que la construcción comience el año próximo. Tiene previsto construir con el tiempo una tercera planta del mismo tamaño.
La empresa confía en que un nuevo proyecto de ley de reforma económica aprobado recientemente en el Senado argentino, que incluye planes para incentivar las grandes inversiones, pueda ayudar a impulsar esos planes de expansión.
"Obviamente, este es el tipo de incentivos que son importantes para nosotros cuando tomamos la decisión de invertir en nuevas fases", dijo a Reuters en una entrevista Simon Henochsberg, vicepresidente de estrategia de Eramet. (Reportaje de Daina Beth Solomon; Edición de Emelia Sithole-Matarise)
